El desastre aún está por cuantificar, ya que los funcionarios tienen por delante la tarea de comprobar qué expedientes se han convertido en cenizas. Los documentos judiciales salían ardiendo por las ventanas en llamas. Podrían ser centenares de expedientes, según los sindicatos, y es muy posible que haya que repetir actuaciones judiciales. Por suerte, abogados y procuradores suelen tener copia de los documentos y muchos de ellos (en teoría todos los expedidos a partir de 2016) están digitalizados. En cualquier caso, los funcionarios de los juzgados de Instrucción números 1 y 2, los afectados por las llamas del incendio, tienen que determinar cuáles son los documentos destruidos. A esto hay que añadir que los cuatro juzgados de instrucción, los dos de Penal, el de Violencia Sobre la Mujer y la Forensía no podrán funcionar mientras no se acondicione el edificio incendiado, algo que puede durar semanas. La única buena noticia es que nadie resultó herido. Puedes ver todas las imágenes aquí.

En cuanto a las causas del incendio, todo hace pensar en un cortocircuito, algo que no sorprende a nadie, teniendo en cuenta el mal estado en el que se encuentra el edificio, aunque no se descarta ninguna hipótesis, incluida la intencionalidad. La Policía Nacional es la responsable de la investigación, que hoy contará con la ayuda de dos expertos de la Brigada Provincial de Policía Científica llegados desde Palma.

El incendio se declaró por la noche. Se supone que el edificio estaba vacío, ya que hace más de diez años que se suprimió el servicio de vigilancia nocturna. Ayer por la noche se recuperó este servicio, al menos de forma temporal. Desde los sindicatos dijeron que tal vez, si hubiera habido vigilancia, el suceso no habría sido tan grave, ya que para cuando llegaron los bomberos el incendio estaba muy avanzado, con la segunda y tercera planta ya en llamas.

El comienzo del incendio

El fuego comenzó pasadas las cuatro de la madrugada. La alerta en el parque de bomberos sonó a las 4.50. Para poder entrar en el edificio, los bomberos tuvieron que forzar la puerta del sótano, donde están los calabozos. Al parecer, el fuego comenzó en un despacho de la segunda planta, en el Juzgado de Instrucción número 1, y a través de una ventana de la parte de atrás se propagó al tercer piso. Esta fue la planta más afectada por el fuego. Aquí se encuentra el Juzgado de Instrucción número 2, en el que ardieron varias oficinas y se quemó una cantidad de expedientes aún indeterminada. Por suerte, los bomberos, siguiendo las indicaciones de los funcionarios, lograron rescatar algunos archivadores repletos de expedientes. Ayer, la actividad del juzgado de guardia (el número 3) se trasladó a la comisaría de la Policía Nacional y a partir de hoy continuará en el edifico Cetis, donde se encuentran los juzgados de Primera Instancia, una parte de la Fiscalía y el Registro Civil. El juzgado de guardia (que ayer era Instrucción 3 y a partir de hoy le toca al 4) se hará cargo, al menos hoy, del los casos de Violencia Sobre la Mujer.

La cuarta planta del edificio, donde se encuentran los dos juzgados de lo Penal de la isla y las oficinas de la Fiscalía de guardia, también resultó afectada, pero sólo por el humo. Una vez sofocado el incendio, sobre las once de la mañana (más de seis horas después del comienzo), los técnicos comprobaron que la estructura del edificio no se vio afectada, si bien fue necesario apuntalar varias zonas de las dos plantas quemadas con el fin de garantizar la seguridad del personal que, a partir de hoy, accederá a la zona para comprobar qué expedientes se han quemado.

El jefe de la extinción, el cabo de los bomberos José Antonio López, confirmó que todo parece indicar que el fuego comenzó en la segunda planta y que se propagó verticalmente por la fachada hasta la tercera, que es la más perjudicada, ya que hay varios despachos completamente destruidos.