A partir del año que viene la central eléctrica de Ibiza, de la compañía Gas y Electricidad Generación SAU (Endesa), no podrá funcionar más con fuel, el combustible más contaminante de los que se emplean en las instalaciones del polígono de es Gorg.

La Comisión de Medio Ambiente de les Illes Balears acordó, el pasado jueves, retrasar hasta el 1 de enero de 2020 (un año más tarde de lo previsto) la obligación de la compañía eléctrica de cumplir con los nuevos valores límites de emisiones de gases contaminantes que marca la Unión Europea en sus cuatro motores denominados MAN (de gas).

Se permite la ampliación de este periodo porque Endesa alega que la inversión necesaria para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno y óxido de carbono en los grupos MAN resulta «inviable» hasta que el Gobierno central no publique la convocatoria de procedimiento de concurrencia competitiva para conceder la resolución favorable de compatibilidad y, con ello, reconocer este gasto al objeto de que la compañía pueda luego recuperarlo a través de las tarifas.

Además, la empresa advierte de que si se viera obligada a prescindir de los cuatro grupos MAN a partir del 1 de enero de 2019 por no cumplir con el límite de las emisiones, se podría producir «un problema de suministro en la isla». Los técnicos de Medio Ambiente han tenido en cuenta, además, que, de producirse el cese de los motores MAN, se daría «la paradoja» de que la central eléctrica debería operar con otros motores (los TG o los BW) que operan con gasoil, gas o fuel y que, independientemente de los valores límite que marca la normativa europea, son «mucho más contaminantes».

De hecho, la sustitución de los MAN por los BW (fuel), los más contaminantes, podría provocar entre10 y 13 veces más emisiones de óxido de nitrogeno, entre cuatro y cinco veces más si se cambian por los TG.

A cambio de la prórroga, la Comisión de Medio Ambiente impone una serie de condiciones. Primero, en el momento que el Gobierno central publique la resolución de compatibilidad, «se iniciará inmediatamente» el proceso de tramitación y ejecución del proyecto de adecuación de las emisiones de óxido de carbono y óxidos de nitrógeno.

Baja de tres grupos de fuel

Además, la compañía debe solicitar la baja de los grupos BW 5, 6 y 7, los tres más contaminantes y cuya vida útil concluyó en 2016. Tras el expediente sancionador que Medio Ambiente abrió a Endesa a raíz de la denuncia que presentaron los centros educativos de la zona de Puig d'en Valls, el Ayuntamiento de Ibiza y el Consell por el fuerte olor a fuel procedente de la central térmica, la compañía se avanzó y anunció en diciembre el inicio del proceso para desmantelar estos tres grupos de fuel. «Se obliga a cerrarlos definitivamente, ahora están parados cautelarmente», explica el director general de Energía y Cambio Climático del Govern, Joan Groizard.

Aún hay otros dos motores BW, el 8 y el 9, que funcionan con fuel y que aunque ahora se mantienen inactivos, según la compañía, se podrían utilizar en caso de necesidad. Su vida útil acaba este 2018.

Por ello, otra de las condiciones que impone la Comisión de Medio Ambiente es que sólo se podrá solicitar «la extensión de la vida de los motores BW 8 y 9 si se emplea exclusivamente gasóleo como combustible», que, aunque sea de origen fósil, es «menos contaminante» que el fuel, según Groizard. Esta condición es la que cierra la puerta a que a partir de 2019 la central eléctrica pueda operar con fuel. El objetivo, recuerda Groizard, es que las instalaciones de Endesa sólo funcionen con gas, que es menos contaminante que el gasóleo y, sobre todo, el fuel.

Por ejemplo, los grupos MAN que funcionan con gas no generan emisiones de dióxido de azufre, el que provoca más problemas de olores y humos, mientras que, según los datos de 2016, los BW 5, 6 y 7 (de fuel) produjeron un máximo de 4,24 g/KWh e (los BW 8 y 9, más nuevos, 3,27) y, en cambio, los TG de gasóleo, 0,86. Lo mismo sucede con los óxidos de nitrógeno. En este caso, los grupos de gas registraron una emisión máxima de 1,08 g/KWh e, mientras que los de fuel alcanzaron la cifra de 14, por 4,86 los de gasóleo.

En cambio, las emisiones de dióxido de carbono son más elevadas en los grupos que funcionan con gasóleo que los que emplean fuel y gas.