¿Quién ha dicho que los milagros no existen? Hoy ha tenido lugar uno. O quizás no se trate de un milagro, pero sí que ha sido una suerte de esas que no suelen aparecer muchas veces.

Portos llegó a Sa Coma hace algo más de cuatro años, cuando en julio de 2012 su dueño decidió que no quería tenerlo más y lo dejó en la perrera.

Portos es un buen perro. Un bretón de pelaje marrón al que la jaula se le quedaba muy pequeña tras más de cuatro años en ella. Es mucho tiempo para un perro en espera de adopción, por eso no tenía muchas papeletas de que alguien quisiese llevárselo a su casa.

Pero ese día llegó. Ese día fue hoy. Un hombre, de buen corazón -seguro- se lo ha llevado a su casa.

Ha sido un gran día en Sa Coma, porque otra mujer también ha adoptado a otra perrita, Doris.

Un día de milagros.