Baleares es la comunidad con mayor abandono escolar temprano; menor proporción de jóvenes de 15 años que estudian; menor porcentaje de chavales de 18 años que siguen formándose; la tasa más baja de veinteañeros estudiando en la universidad... En términos educativos el archipiélago está acostumbrado a ser el farolillo rojo. ¿Y si cogiésemos todos esos indicadores y creásemos un índice global educativo? Así lo ha hecho el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, que con su Proyectoscopio busca cómo comparar la realidad de los jóvenes en Europa. Y a nivel educativo, los jóvenes baleares no están solo a la cola de España, sino del continente entero.

Así lo indicaron ayer los responsables de este proyecto, vinculado a la Fundación de Ayuda contra la Drogradicción (FAD), que adelantaron algunos contenidos de este estudio desde Madrid.

Según sus cálculos -hechos a partir de las estadísticas del Eurostat- el índice educativo de la UE es del 0,58 sobre uno; el de España es del 0,52 y Baleares cierra la tabla con un escaso 0,18. Lituania (0,85), Polonia (0,76) y País Vasco (0,75) encabezan la tabla: sí, España es tan extrema que es capaz de meter una comunidad en el pódium de los mejores resultados y a la vez tener otras tres regiones Canarias (0,34), Castilla-La Mancha (0,30) y Baleares (0,18) en el último vagón. Rumanía, con un índice de 0,36, duplica el resultado balear.

El índice educativo se calcula fijándose en seis indicadores. Y en cinco de ellos el sistema insular arroja los peores datos del país, empezando por la tasa de población de entre 25 y 29 años con educación terciaria (universitaria o de FP Superior): esta tasa en Baleares es de del 32%; en Europa del 36% y en España del 40% (sí, en este caso nuestro país supera al promedio europeo). En cuanto a jóvenes de 15 años que están estudiando, en las islas la tasa es del 92%, frente a una media nacional y continental del 97%. A los 18 años, ocho de cada diez españoles y ocho de cada diez europeos están formándose, pero en las islas apenas un 55% de los jóvenes siguen yendo a clase a esa edad.

Universitarios

Otro indicador es la proporción de jóvenes de 22 años que están en la universidad: en España y en la Unión Europea son el 31%, pero en Baleares apenas llegan al 12%. Un ítem en el que siempre despuntan las islas (para mal) es el de abandono escolar temprano, los chicos que dejan los estudios tras cumplir con la etapa obligatoria: la media europea es del 11%, la española del 22% y la balear del 32%.

El único indicador en el que Baleares no está a la cola es en la proporción de jóvenes que están cursando Bachillerato o estudios equivalentes y están aprendiendo una segunda lengua extranjera. Con un 10% de chavales que están estudiando un segundo idioma, el archipiélago no queda en último lugar (Canarias y Cataluña arrojan peores porcentajes), pero el resultado tampoco da para descorchar el champán ya que estamos lejos del promedio estatal (31%) y a aún más distancia del europeo (51%).

Este índice educativo ha servido a Proyectoscopio para calcular otro más amplio que han denominado índice de la juventud, que los autores han calculado fijándose también en indicadores de empleo, emancipación, vida y uso de las nuevas tecnologías.

En este índice global de juventud, Baleares queda en el antepenúltimo lugar de la clasificación, que incluye los datos de los países europeos y de las comunidades españolas: solo Canarias y Rumanía están peor que el archipiélago. Dinamarca, Finlandia y los Países Bajos aparecen como los mejores lugares para ser joven.

El caso balear es curioso:es el mal dato del índice educativo el que nos manda a los últimos puestos ya que en los otros indicadores evaluados (vida, empleo, uso de nuevas tecnologías y emancipación) obtenemos unos resultados algo mejores, aunque sea por porco, que la media española.

En Baleares, durante muchos años principalmente se ha culpado del abandono escolar a la facilidad con la que los jóvenes encuentran un trabajo en el sector turístico. Los datos de desempleo de la población insular de entre 15 y 30 años son los más bajos del país: un 30% está sin trabajo frente a datos como el andaluz o el canario, que rozan el 50% de paro juvenil.

Ahora bien, los jóvenes parados de las otras comunidades se mueven más que los baleares: el archipiélago tiene la mayor proporción de chavales que no trabajan y tampoco estudian, con un 13% de ‘ni-nis’. La media europea es del 9%, aunque hay otros países que arrojan peores datos que Baleares, como Bulgaria, donde el 23% de jóvenes inactivos no sigue ninguna formación.

Nuestros jóvenes trabajan más, pero ¿son sus trabajos más temporales y precarios por estar ligados al turismo? Pues aunque los datos de temporalidad laboral son altos en las islas, no despuntan especialmente del resto de comunidades. De los jóvenes que trabajan en Baleares, un 49% lo hace con un contrato temporal frente a un promedio estatal del 52%. En Europa, ‘solo’ un tercio de los menores de treinta años tienen un contrato temporal.

Jóvenes independientes

Ligado a la mayor tasa de empleo aparecen los datos de emancipación. Y si nuestra población menor de 30 años tiene menos tasa de paro que otras comunidades, parecería lógico que la proporción de chicos y chicas que abandonan el nido familiar y se instalan por su cuenta fuera mayor que la media española, y lo es, pero por muy poco: un 11% de los isleños de entre de 20 y 24 años viven por su cuenta frente a un 9% de españoles. En Europa, un 28% están emancipados. Aumentando la franja de edad entre los 24 y los 29 años, en las islas el 45% viven por su cuenta, frente a un 42% español y un 58% europeo.