La abogada de los ya famosos hermanos Cazorla, Ascensión Joaniquet, anunció ayer que va a presentar un escrito en el procedimiento que se sigue ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza para que se reclame a la cadena de televisión La Sexta el vídeo sobre el programa ´Equipo de Investigación´ que emitieron el viernes de la semana pasada sobre estos presuntos butroneros ibicencos.

«Creo que se debe averiguar de dónde han surgido estas filtraciones, porque la causa está aún en fase de instrucción y, en consecuencia, las actuaciones no son públicas», dijo la abogada en referencia a los vídeos en los que se ven algunos de los robos que se les achacan a los hermanos Cazorla y a uno de sus presuntos cómplices.

Además, subrayó la letrada, en el programa se dramatizaron o recrearon una serie de escenas que, «aparte de vulnerar el principio de presunción de inocencia» de sus clientes, «revelan una serie de datos íntimos y particulares que están absolutamente fuera de lugar y creo que esto se debería investigar».

Cristian y Jonathan Cazorla fueron arrestados junto con otra persona en agosto del año pasado -en un abordaje llevado a cabo por la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía- cuando escapaban en una lancha de alquiler de Mallorca a Ibiza tras la presunta comisión de tres robos en la primera de estas islas.

Los investigadores les atribuyen la comisión de al menos 29 robos perpetrados en Ibiza y en Mallorca en los dos últimos años. Según la información policial, el botín total de los robos cometidos asciende a más de un millón de euros en joyas y en efectivo. En un solo asalto a un establecimiento de Vila sustrajeron joyas por valor de 500.000 euros.

Tras la detención de los hermanos, la Policía y la Guardia Civil informaron de que estos usaban una empresa legal dedicada a la seguridad para pasar revisiones de hoteles, restaurantes y discotecas y, de esta forma, obtener información sobre cómo asaltarlos. Posteriormente desactivaban las alarmas, accedían a los locales objetivo mediante butrones y abrían las cajas fuertes con temperaturas de 4.000 grados mediante una técnica de soldadura denominada oxicorte.

Según los investigadores, la organización estaba dirigida por los dos hermanos y estaba muy bien estructurada. Cada miembro asumía su papel.

Unos conseguían la información, otros los vehículos y otros acometían los robos, principalmente hoteles, restaurantes, discotecas y empresas de alquiler de coches, siempre según la información policial.