Mir estrena el documental de la Guerra Civil en Ibiza

­El director ibicenco José Luis Mir, autor entre otros de los documentales ´Ibiza. Vuelo 602´ o ´El crucero Baleares´ presenta en Sant Antoni su nuevo y más ambicioso trabajo: un documental doble, de dos horas de duración, sobre los hechos que sucedieron en Ibiza durante la Guerra Civil. Este trabajo incluye fotografías inéditas sobre el conflicto, además de documentos nunca antes vistos y recreaciones que ha hecho de momentos concretos con actores en escenarios reales.

Fran Tienda, concejal de Cultura, agradeció a Mir que haya escogido Sant Antoni para el estreno de la pieza que se hará en dos sesiones. La primera, titulada ´Las islas cambian de color´, se podrá ver mañana viernes 22 de enero en el Centro Cultural Cervantes a las 19.30 horas, mientras que el 29 de enero se proyectará la segunda parte, ´Los años grises´, también a las 19.30 horas.

«Soy un forofo de los temas históricos y la Guerra Civil en Ibiza y Formentera era un periodo que no se podía dejar de lado. Comencé el trabajo hace aproximadamente dos años y medio, poco a poco, buscando información y he encontrado muchas cosas desconocidas, fotos, documentos... hasta juntar un volumen bastante importante de material, por lo que he decidido hacer dos horas y poder profundizar en temas que la gente no conocía y que creía que debía de conocer», explicó ayer el director.

En su línea, Mir huye de dirigir al espectador hacia un bando u otro «prefiero que cada uno saque sus conclusiones de los hechos», dice, y se centra en mostrar los testimonios directos y la documentación que ha descubierto en archivos de Madrid y Palma, sobre todo. Todo ello irá acompañado de recreaciones con actores reales de momentos concretos y también recreaciones digitales de batallas. El enfoque es «neutral», para que la gente «conozca la realidad, lo que sucedió», insiste.

Uno de los testimonios más impactantes para Mir es «el de un soldado, que es de Sant Antoni, que estuvo en el Castillo justo después de que salieran los republicanos tras los fusilamientos del 13 de septiembre 1936», explica el director. «Tuvo que entrar a limpiar después y fue tremendo, fueron más de un centenar de fusilados. Los soldados que venían con él durmieron allí y, como no había camas, tuvieron que hacerlo encima del suelo sobre las manchas de sangre», recuerda.

La mayor parte de los testimonios, salvo el de Mariano Llobet, son de personas completamente anónimas. Algunas le han contado su historia pero no han querido salir en cámara, lo que demuestra que hay heridas sin cerrar. En este sentido destacó el de una mujer de Santa Eulària, que no sale en cámara. Le relató que su marido se había escondido en el bosque «y que los nacionales la visitaron en su casa al menos en tres ocasiones para preguntar por su paradero» y en las tres ocasiones «le hicieron ir al bosque con su hija de ocho o nueve años y les dieron una pala para cavar un nicho mientras la interrogaban sobre él. No lo llegaron a matar. Es un testimonio que cuando te lo cuentan te quedas un poco...», explicó Mir sin encontrar la palabra exacta para describir la enorme impresión.

Recreaciones y apoyos

Para las recreaciones con actores ha contado con vehículos de la época que le han prestado y el vestuario, que es real, lo ha adquirido a través de Internet en portales especializados.

«Es un nuevo reto de Mir para contarnos la historia de nuestras islas, un tema que le apasiona como ha mostrado en sus documentales anteriores», valoró Tienda.

Por su parte, el concejal de Cultura de Vila, Pep Tur, [que asistió a la presentación porque el ayuntamiento ha colaborado también económicamente en el proyecto junto con los consistorios de Sant Antoni, Santa Eulària y el Consell de Formentera] agradeció el trabajo que ha hecho Mir «durante tantos años recuperando la historia de las islas». «En este caso son dos horas de documental que le han llevado muchos meses de trabajo», apuntó y avanzó que se estrenará también en Ibiza, «en Can Ventosa en próximas fechas». Tur también valoró que se hayan unido varias instituciones para ayudar al proyecto «ya que es una forma de dar apoyo a los creadores y, a la vez, trabajar juntos por la historia y la cultura de la isla», concluyó.