El Movimiento Pitiuso Pro Radioterapia recordó al director del Ib-Salut, Juli Fuster, que en ocasiones los enfermos de cáncer que se tienen que desplazar a Mallorca para la radioterapia pueden llegar a tardar «dos años» en cobrar las dietas y le exigieron que busque la manera de adelantar estos pagos.

«Nos dijo que el problema reside en la ley de pagos a proveedores», apunta el portavoz del Movimiento, Luis Cros. «Una vez que el Ib-Salut da la orden de pago, es Hacienda quien tiene que abonar el dinero, pero primero tiene que pagar a los proveedores y se queda sin dinero para los pacientes», añade. Cros explica que Fuster les aseguró que intentarán «considerar a los pacientes como proveedores» para reducir el tiempo que tardan los enfermos y sus familiares en recibir el dinero de las dietas. «Decir que lo mirarán no es un compromiso», opina, molesto, el portavoz.

En la misma reunión también comunicaron al responsable del Servei Balear de Salut los problemas de alojamiento que tienen estos enfermos y sus acompañantes. En este sentido, recordaron que, en un primer momento, estaba previsto que el hospital de Son Espases, en Mallorca, contara con un espacio para los pacientes desplazados desde las otras islas, una idea que, finalmente, se desechó.

«También nos dijo que quieren buscar un espacio en el hospital de Son Espases para poder ubicarlos», señala el portavoz del Movimiento Pitiuso Pro Radioterapia, quien critica que no se trate de una promesa «en firme».

Cros aprovechó para pedir a Fuster que, tras la dimisión de la junta insular y del comité científico en Ibiza de la Asociación Española Contra el Cáncer, no firme «ningún convenio» con esta agrupación.