El presidente de la Asociación de Propietarios Forestales de Ibiza, Rafa Tur, ha reiterado la importancia de haber instalado los depósitos antiincendios que están siendo utilizados nuevamente en las labores de extinción del incendio de Sant Miquel. Asimismo, han anunciado que solicitarán a las instituciones medidas como la creación de tomas de agua o fajas antiincendios en los márgenes de las carreteras.

Según Tur, en esta ocasión los efectivos se abastecen del depósito situado cerca del puerto de la localidad. "En el incendio de hace 15 días, los efectivos usaron el depósito de Can Garrovers. Ahora, se usa el situado cerca del puerto, pero necesitamos más instalaciones así. Pediremos a los ayuntamientos y otras instituciones que habiliten puntos de agua, con tomas adecuadas, para que los medios puedan usar las infraestructuras de empresas como Aqualia, porque no puede ser que todo recaiga sobre los particulares", ha explicado.

"Dentro de la desgracia, estamos contentos porque hemos visto la importancia de un proyecto que hemos puesto en marcha. Ha sido efectivo y no nos pararemos aquí. Queremos llegar a tener 40 ó 50 depósitos", ha insistido el presidente, quien ha recordado la puesta en marcha de una campaña de captación de fondos "ya que se ha comprobado que si tienes los medios, el fuego se puede apagar más rápidamente".

La Asociación ha editado un díptico con información sobre las vías de colaboración y así, cualquier empresa interesada puede participar aportando desde 1.000 euros, para el mantenimiento de depósitos ya instalados, hasta 20.000 euros para la instalación de nuevos contenedores.

"Se ha demostrado que es lo más eficiente. O tienes medios, o no los paras", ha recordado Tur, quien ha destacado que la Asociación ha recibido ya varias aportaciones y no descartan iniciar un proyecto de crowfunding para impulsar su proyecto.

El presidente ha exigido que se actúe también en los márgenes de las carreteras, creando fajas antiincendios "porque cada semana hay un fuego y es que, con la sequía, cualquier chispa se convierte en un incendio". Incluso, ha recordado la importancia de impulsar otras acciones, como la posible restricción del paso de vehículos en determinadas zonas de la isla en épocas de sequía para evitar que una colilla o la chispa de algún motor provoquen un incendio.

"Estamos en una situación muy peligrosa y lo de ayer puede repetirse en cualquier momento porque mañana mismo se pueden dar las mismas condiciones", ha alertado.