Todos los ibicencos saben que Ibiza es una ciudad fundada en la antigüedad por los fenicios. Algunos incluso tienen impreso en la memoria el año de 654 a.C. que, según los textos clásicos, fue el de la fundación oficial de la ciudad. Pero muy poca gente es consciente de que Ibiza es una de las siete ciudades más antiguas de toda España. Y, sin embargo, así lo atestigua la arqueología.

Las primeras ciudades españolas datan de época fenicia (siglo IX a.C. la más antigua, Huelva), si bien con anterioridad existieron asentamientos humanos formados por grupos indígenas. Pero no eran ciudades. Tomando como criterio la fundación de una urbe más o menos grande y que no haya quedado deshabitada en ningún momento, perviviendo hasta la actualidad, Ibiza podría situarse entre la quinta y séptima población más antiguas del país.

Los arqueólogos Benjamí Costa y Ricard Marlasca coinciden en afirmar que las últimas investigaciones realizadas tanto en Ibiza como en la Península consolidan un grupo de ciudades andaluzas como las más viejas. Se trata de Huelva, Sevilla, Carmona (Sevilla), Cádiz, Málaga, Almuñécar (Granada) y Adra (Almería). Otras, como Empúries, corresponden ya al siglo VI a.C. y además quedó despoblada en la Edad Media.

Sagunto, al norte de Valencia, data también de la misma época y Cartagena corresponde al siglo III a.C.

Fundación de Ibiza

Ibiza, del siglo VII a.C., forma parte del reducido grupo de las urbes más antiguas que integran las citadas poblaciones andaluzas. Es el único caso fuera de la Península, porque tanto Palma y Pollença como Maó y Ciutadella datan de época muy posterior.

Gran parte de las grandes capitales actuales datan ya de los romanos. Es el caso de Barcelona y Zaragoza (ambas del siglo I a.C.), de Valencia y Córdoba (II a.C.) o de Tarragona (III a.C.).

Benjamí Costa señala que para fechar la llegada de los fenicios a Ibiza al promontorio de Dalt Vila en el siglo VII se tienen en cuenta hallazgos bastante recientes, entre ellos las construcciones y la cerámica descubiertas durante las obras de excavación para convertir en Parador el Castillo de Ibiza. También corresponde a esa época el material aparecido en el subsuelo del Museo de Arte Contemporáneo durante su reciente ampliación. Y, finalmente, las tumbas más antiguas de la necrópolis del Puig des Molins datan del siglo VII. No hay dudas entre los expertos.

Tradicionalmente se consideraba que la ciudad de Cádiz era la más antigua de España, y se daba por cierta la fecha citada en fuentes helenísticas del año 1100 a.C. como momento de la fundación. «Pero en el lugar no se ha encontrado nada tan antiguo», advierte Benjamí Costa, quien señala: «Lo más antiguo que se ha hallado en Cádiz es del siglo VIII a.C.».

«Mientras hay autores que se creen a pies juntillas lo que decían los antiguos y defienden esa antigüedad tan grande, otros, que hoy en día ya debemos ser mayoría, decimos (igual que Santo Tomás) que las antigüedades hay que poder tocarlas», añadió para reafirmar la importancia de los hallazgos materiales para poder confirmar la datación de hechos.

A tenor de los descubrimientos realizados, más antigua que Cádiz sería Huelva, que ya contaría con un núcleo urbano habitado en el IX a.C. «Era una ciudad, un núcleo indígena muy importante, que comerciaba con los fenicios. Algunos autores plantean que fue la antigua Tartessos», una civilización del sur de Iberia previa a los fenicios.

Ricard Marlasca coincide con Costa, aunque matiza: «Es cierto que ahora se dice que Huelva pueda ser más antigua, pero en todo caso no sería por mucha diferencia. Además, tal vez el próximo año se realiza otra excavación en Cádiz y encuentran algo más antiguo allí y la cosa vuelve a cambiar».

Sea como sea, la ciudad de Ibiza avanza hacia el tercer milenio de su existencia ininterrumpida, algo de lo que solo media docena de lugares de España pueden presumir.