Premis Ramon Llull 2014 | Homenajes en Ibiza
Adlib, mucho más que un estilo de moda
Exdirectivos del Fomento del Turismo rememoran el nacimiento de este fenómeno turístico y económico

La muestra montada en el Consell recordaba los inicios de Adlib. / JUAN A. RIERA
j. ll. f. | ibiza
La moda Adlib, premiada también por el Govern balear, fue objeto de un reconocimiento específico en Ibiza, en un acto organizado ayer por la tarde por el Consell en la sala de plenos de la institución insular. Se trató de una ceremonia modesta, a la que asistieron fundamentalmente diseñadores y también algunos de los impulsores de esta tendencia, hace ya más de cuarenta años.
El presidente del Consell, Vicent Serra, proclamó que «Adlib es más que un estilo de moda». «Es también turismo, empresa, pequeños puestos de trabajo, mujeres modistas y todo lo que año tras año permite organizar la pasarela. Es parte de nuestra isla y de nuestra historia», afirmó.
El conseller de Comercio e Industria, Vicent Roig, tributó un homenaje a aquellos pioneros de la moda Adlib que hicieron posible que esta continúe viva aún hoy. «Esta pasarela conllevó una verdadera revolución en el mundo rural», señaló Roig, quien se consideró a sí mismo «un hijo de Adlib». «Gracias a las pequeñas pagas que recibía mi madre por hacer las puntillas de los vestidos, podía pagarme clases de inglés», explicó.
Vicent Roig insistió en la importancia que ha tenido esta industria «para una generación como la de los años setenta». También dijo que el premio otorgado por la Comunitat Autònoma es extensivo a todos los integrantes del proceso de confección y venta, desde «las costureras y teñidoras, hasta las modelos y diseñadores; todos merecen este premio».
El Fomento del Turismo de Ibiza fue protagonista indiscutible del acto de ayer, ya que esta entidad fue la que impulsó de forma decidida, con el estímulo «insistente» de la desaparecida Smilja Mihailovitch, esta nueva moda textil.
El empresario y exdirectivo del Fomento José Colomar rememoró los orígenes de esta industria e incluso la génesis de su nombre. «Adlib, que significa ad libitum, era hablar de libertad en el año 1971; era una provocación», señaló Colomar.
La aparición de la nueva moda «fue un shock en la isla», añadió el empresario, que reiteró el «empuje» que le dio Mihailovitch para lograr que se materializara toda la maquinaria humana, técnica y comercial que requería la moda Adlib. Debido a ello, se creó una comisión encargada de cristalizar la pasarela anual Adlib.
«El primer año constituyó un auténtico éxito, hicimos desfiles en toda Ibiza y Formentera, fue algo apoteósico», indicó.
Colomar consideró que esta tendencia «ha hecho mucho por Ibiza. Es una alegría ver que al fin el Govern balear se ha acordado de nosotros».
Entre el público presente figuraban personalidades del turismo como Ernesto y Enrique Ramón Fajarnés o Mariano Llobet, que durante la década de los años 70 ocuparon puestos importantes en la industria turística y en la política local.
El presidente del Consell, por su parte, tuvo palabras de elogio hacia su antecesor Antonio Marí Calbet, «que implicó a la institución en la organización de la pasarela». Gracias a todo ello, hoy la moda Adlib «continúa siendo un proyecto colectivo», afirmó Serra.
«El premio en Palma lo recogió el Fomento, pero todos sois los que seguís contribuyendo a que la moda Adlib siga siendo auténtica, libre y, sobre todo, ibicenca», concluyó el presidente en su alocución.
- Sebastián Yatra, fue mala idea llevarte una piedra de Ibiza a La Revuelta
- Tres herederos de Baleares se ahorran 55 millones de euros cada uno por la rebaja fiscal del Govern
- Una aplicación para avisar de la presencia de serpientes en Ibiza
- El investigador Joan Planells 'Murtera': «Hasta los 50 Ibiza era el sitio de España con más proporción de campesinos»
- Madrid avisa a Balears de que los yates privados se podrán alquilar desde el 15 de agosto
- El tiempo en Ibiza: la Aemet activa la alerta por tormentas y probabilidad de granizo
- El insecto sediento que agujerea sandías y muerde mangueras en Ibiza
- Un barco de pasajeros pierde el control y acaba en la playa de Cala Llonga