La presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Ibiza, Pepi Costa, aseguró ayer que las familias estan «enfadadas» con la situación de conflictividad que se está viviendo este curso en las aulas y exigió a los docentes y la conselleria que negocien y lleguen a una solución. «Hay que reabrir el diálogo», insistió la presidenta de la FAPA ibicenca.

Costa señaló que la agrupación de padres «respeta» el derecho a la huelga de los docentes, pero considera que no es la medida que debe adoptarse para presionar a la conselleria, ya que perjudica a los alumnos y «ha quedado demostrado que no sirve de nada». «Hubiéramos preferido que no se comvocara esta nueva jornada de paro», reiteró.

A pesar de esto, Costa calificó de «ofensiva» la actuación de la conselleria al iniciar la tramitación de expedientes disciplinarios a docentes derivados de la aplicación del decreto de trilingüismo. «No queremos más días de huelga, pero la de Educación no es la manera de actuar», apuntó la presidenta de la FAPA, que indicó que estas actuaciones afectan al respecto que los alumnos tienen en sus profesores.