Tres concejales del Ayuntamiento de Ibiza y el exconseller socialista Joan Serra Mayans han sido imputados y deberán declarar en el juzgado por su participación en una supuesta trama para contratar empresas y servicios de forma irregular a través del proyecto Eivissa Crea y del vivero de empresas municipal.
El juez ha dado credibilidad a una denuncia presentada en 2008 de forma anónima ante la Fiscalía y ha decidido llamar a declarar al entonces conseller de Trabajo y Desarrollo Económico, pero también a los concejales del Ayuntamiento de Ibiza Vicent Ferrer (ExC) y Enrique Sánchez (PSOE). En la misma causa han sido imputados también el edil Alfonso Molina (PSOE) y un trabajador municipal adscrito al área de Promoción Económica.
Vicent Ferrer era en aquel momento responsable de Turismo, Comercio y Participación Ciudadana y fue imputado también por la Audiencia Provincial, como miembro de la junta de gobierno de Lurdes Costa, por la condonación de la deuda a la empresa adjudicataria de la zona azul, Park Control. Sánchez fue concejal de Bienestar Social. Molina no formaba parte del equipo de gobierno ya que no empezó a militar en el PSOE hasta 2011, año en que se presentó a las elecciones municipales en la lista de Lurdes Costa. Sin embargo, posee varias empresas de consultoría y formación que fueron contratadas durante aquel mandato por el Ayuntamiento de Ibiza y por otras administraciones. De hecho, una de sus empresas fue la responsable de la redacción del proyecto Eivissa Crea. Ferrer, Sánchez y Molina forman parte de la Corporación en la actualidad como concejales de la oposición.
La FSE y ExC aseguraron ayer a través de un comunicado conjunto que «lucharán sin descanso para limpiar el honor de los políticos y funcionarios calumniados». Califican de «rocambolesca» la denuncia anónima que, según indicaron, implica inicialmente a una quincena de trabajadores municipales y a cerca de una decena de responsables políticos de diferentes administraciones.
El PP, personado en la causa
Los progresistas señalan también que el Partido Popular se personó posteriormente en esta causa, y detallan que fue la entonces concejal y ahora diputada Virtudes Marí la que se personó «en un procedimiento que nadie conocía y del que, casualmente, ella tuvo noticia no se sabe por qué medios». PSOE y ExC acusan al PP de alimentar la denuncia anónima que «habla de una supuesta trama vinculada al proyecto Eivissa Crea y al vivero de empresas para contratar personas y servicios de forma irregular». La misma denuncia se refiere también, según el comunicado de estas formaciones, a «posibles irregularidades en el alquiler de un local en Cas Serres». Afirman que la denuncia «pretende vincular este alquiler con movimientos internos en el Partido Socialista» y es en esta segunda causa en la que el PP se personó.
Según explicó ayer Alfonso Molina, en la denuncia, presentada en Palma hace más de cuatro años, «se acusa a mucha gente de muchas cosas». Entre las personas a las que implica de algún modo el denunciante anónimo está también el pastor de la Iglesia Evangélica de Cas Serres, al que ya se relacionó con otro escándalo socialista por un intento de afiliación masiva de fieles antes del último congreso de esta formación.
Molina no ha recibido aún notificación oficial de su imputación, pero ha tenido ocasión de consultar el sumario de esta causa y sabe que los imputados deberán declarar «a finales de febrero». El edil explica que lleva más de 20 años trabajando en Ibiza y que sus empresas han sido contratadas por las distintas administraciones con equipos de gobierno de distinto color político. «Si el denunciante no fuera anónimo le denunciaría por calumnias», indicó ayer un indignado Molina que sostiene que «no hay nada que esconder» y que estará «encantado de declarar lo que haga falta». «Éramos un proveedor externo. Sé que estoy en el sumario, pero no sé de qué me acusan. Se dice que se nos contrata muchas veces y se hacen afirmaciones calumniosas», relató.
ExC y la FSE defienden que las «numerosas» acusaciones que se hacen en la denuncia son falsas y que el escrito «aunque intenta ser una relación exhaustiva de hechos, nombres y datos personales, contiene una gran cantidad de errores y omisiones», por lo que afirman que «solo puede haber sido realizado por una persona muy cercana a los hechos parcialmente relatados movida por el rencor o la envidia y que ha aprovechado el anonimato para vomitar toda una serie de hechos inconexos y sin demostrar». Arremeten también contra Virtudes Marí, cuya adhesión a la denuncian consideran «una muestra más de su forma intoxicadora de hacer política, siempre buscando hacer daño al adversario en lugar de intentar plantear alternativas constructivas por el bien de la ciudadanía».
Las explicaciones
Los progresistas recordaron que Eivissa Crea fue un proyecto desarrollado con fondos europeos «que permitió la creación de numerosas empresas» en Vila. Señalan también que además del Ayuntamiento de Ibiza participaron una quincena de agentes sociales como sindicatos, patronales y asociaciones y explican que las colaboraciones del Consell durante legislaturas pasadas con este proyecto se justifican por su éxito, ya que «dio apoyo para que siguiese en marcha el vivero una vez finalizado el apoyo económico de la UE». Respecto a la apertura del local vecinal de Cas Serres, indican que fue un compromiso electoral como los de es Pratet y Puig des Molins. «Si bien es cierto que por diferentes razones este local no acabó siendo operativo, en ningún caso se puede vincular a una operación como la que se insinúa en la denuncia», destacan.
