Casi 25 niños se reunieron ayer en Cala Gració para jugar al pollito inglés, al pañuelo, al mata mata, tira de la cuerda y otras muchas actividades en el agua y recuperar así, los juegos de toda la vida. Esta tarde de actividades fue organizada por la escuela de tiempo libre y animación S´Espurna y duró desde las 4 a las 6 de la tarde.

Los monitores Sergio, Irene y Mónica fueron los encargados de guiar a los pequeños entre cada juego y explicarles las normas. Este año asistieron más niños al encuentro, según afirmó Sergio, que también contó que «al principio estaban más cortados» pero que se animaron pronto.

Niños de entre 5 y 12 años correteaban por toda la playa, inquietos y deseosos de hacer «cuantas más actividades mejor», aunque con alguna que otra trampa aprovechando el descuido de otros. Las madres les observaban encantadas por poder separarles por un día de la consola y el ordenador. Fran confesaba que le gustaba más «venir a la playa que jugar con la play», porque: «Esto es más divertido y haces amigos».

Muchos juegos se trasladaron al agua dado el intenso calor y que los niños necesitaban refrescarse, aunque Iker, de 12 años, se lo estaba pasando tan bien que le daba igual el calor. En los juegos en la arena no faltaron los relevos con vasos de agua para mojarse unos a otros y paliar los efectos del sol. Algunas niñas, incluso, propusieron un concurso de baile en formato ´Tú si que vales´, que no estaba incluido en el programa.

Los monitores no se quedaron atrás, ellos también jugaron, a su manera, tirándose agua y echando una que otra carrera: «Todos jugamos y nos lo pasamos bien», comentó Mónica.