Dos individuos asaltan un locutorio de Santa Eulària a punta de pistola

Santa Eulària | S. Parra

Una mujer que regenta un locutorio situado en las inmediaciones del mercado de Santa Eulària vivió uno de los momentos más angustiosos hace 10 días cuando un par de atracadores le colocaron una pistola en la sien y amenazaron con dispararle si no les entregaba el dinero y no pedía auxilio, explicaron ayer familiares de la víctima, que explicaron que desde entonces «no le golpearon pero está muy asustada, no quiere quedarse sola en ningún momento y tiene miedo de que los ladrones vuelvan para hacerle daño a ella o a su hija por haber presentado la denuncia».

Los hechos ocurrieron el viernes 15 sobre las 21,45 horas, momentos antes de que la mujer se dispusiera a cerrar el negocio. «Parece ser que estaban observando y lo planearon todo porque escogieron un momento en que no había nadie más en el local, los negocios de alrededor están ya cerrados y en un día en el que se suele hacer algo más de caja», explicaron las mismas fuentes.

Dos hombres, uno de ellos encapuchado y con pasamontañas, y otro a cara descubierta, entraron en el local y rápidamente se dirigieron al mostrador tras el que se encontraba la víctima.

Con acento colombiano

«El hombre de la cara descubierta, de complexión normal, pelo corto y trigueño (de tez morena) empezó a amenazarle e insultarle mientras sacaba el arma y la apuntaba a su cabeza», relataron los familiares de la víctima, que explicaron que este asaltante fue el único que se dirigió a la mujer y lo hizo con acento colombiano.

Mientras tanto, el compañero del ladrón que empuñaba el arma rodeó el mostrador y, sin mediar palabra, se apoderó de toda la recaudación, entre 600 y 800 euros. Tras ocultar el dinero entre su ropa, hizo un gesto a su compañero y ambos abandonaron rápidamente el local.

Uno de los familiares de la víctima explicó ayer que tres días antes, sobre las tres de la tarde, dos hombres de complexión normal y con rasgos sudamericanos entraron en el locutorio en actitud sospechosa.

«No compraron nada ni pidieron usar el teléfono o los ordenadores. Cuando les pregunté si querían algo, me dijeron que sólo miraban, pero me llamó la atención de que lo que hacían sobre todo era mirar hacia arriba, como buscando cámaras», señaló. «En aquel momento me pareció raro, pero uno no piensa mal y me imaginé que podía ser gente que quería poner también un locutorio y andaba por aquí tomando ideas», añadió.

Tras el atraco, la víctima dio aviso a la Policía Local y a la Guardia Civil. Este último cuerpo se ha hecho cargo de la investigación aunque, de momento, no ha trascendido que se haya realizado ninguna detención en relación a este caso o que se hayan producido asaltos de similares características en las islas.

Pocos viandantes y policías

Los dependientes de los dos locutorios de la zona explicaron que cierran a las 22 horas, «cuando el resto de comercios lo han hecho una hora antes y apenas hay viandantes». También aseguran que hay poca vigilancia policial y están estudiando avanzar a las 21 horas el cierre.