Con la idea de fomentar el conocimiento de la elaboración del licor típico de Ibiza, el artesano licorero Joan Fluxà organiza cada mes un curso de aprendizaje para elaborar las hierbas ibicencas y el café Caleta, dos sabores originales y autóctonos de gran arraigo en la isla que se utilizan como digestivos y bebida típica en fiestas, comidas y eventos tradicionales de la gastronomía y el ocio isleño. Este domingo 15 de diciembre es la próxima convocatoria, para la que los interesados pueden apuntarse enviando un correo electrónico a juantur@canfluxa.com, o enviando un whatsapp al 649192285. El coste del curso es de 23 euros (1 euro para la ONG Proyecto Juntos).

El curso que imparte el artesano Fluxà es para todos los públicos y mayores de 18 años. La divertida y amena aventura comienza a las diez de la mañana en la finca que el artesano posee en Can Ramón, donde tiene una pequeña destilería, un punto de venta de los productos artesanales que elabora y un huerto de 4.000 metros cuadrados donde cultiva las hierbas y plantas esenciales para obtener el licor de hierbas artesanales, y otras plantas que utiliza para otros productos naturales con recetas de su abuela y bisabuela.

Tras la inscripción y bienvenida a los participantes, los cursillistas recogen una pegatina identificativa con sus nombres, que al final utilizarán para pegar en la botellas de sus hierbas. A continuación, se dirigen al huerto situado al lado de la finca, donde se les facilita un pequeño cesto payés con unos guantes y unas pequeñas tijeras especiales para cortar las hierbas y protegerse de las picaduras de algunas de ellas.

Recolectar 12 hierbas

En el recorrido por el huerto, el artesano indica el tipo de hierbas que hay que coger, cómo hay que ejecutar el cuidadoso corte, explica sus propiedades, dónde se pueden encontrar en los campos de la isla y cuál es la época ideal para recolectarlas en estado silvestre. De esta forma, los aprendices de artesanos cortan cuidadosamente pequeñas ramas de una docena de hierbas y las amontonan cuidadosamente en el cesto.

El artesano invita a probar los sabores naturales de algunas de ellas, como la menta y la hierbabuena, para comprobar el contraste de sus sabores y, en otros casos, indica la utilidad de otras como la ruda, que se utilizaba en tiempos ancestrales para provocar abortos o curar otro tipo de enfermedades.

En cada planta hay un cartel indicativo con el nombre y sus propiedades. La recolección comienza con la frígola, planta única en Ibiza e indispensable para lograr el sabor de las hierbas, y continúa con hierba luisa, romero, enebro, hierbabuena, hierba sana, manzanilla, etcétera.

Introducción en la botella

Introducción en la botella

Con el cesto lleno, la ilusión y la curiosidad desbordadas, los aprendices se sitúan en una gran terraza al aire libre alrededor de una larga mesa cubierta con un mantel campestre a cuadros donde hay botellas vacías, un palito de madera redondo, limones, naranjas y otras hierbas hasta completar las 17. Aquí comienza el momento crucial de la elaboración, introduciendo las ramas de las hierbas recolectadas en la botella con la ayuda del palito redondo, y se añaden las otras plantas del jardín en su justa medida, que facilita el artesano, junto a un trozo de piel de naranja y de limón, dos frutos que determinarán el grado de acidez del licor final.

Reutilizar las hierbas

Reutilizar las hierbas

La idea de que las hierbas solo se pueden utilizar una vez y para cada botella es errónea. Las mismas se pueden reutilizar hasta en tres ocasiones, y con ello se gana sabor durante la maceración. Macerar es el procedimientos básico para la creación de un licor, dependiendo del alcohol que se utilice.

Añadir el anís

Añadir el anís

A continuación, se le añade el anís en garrafas de plástico transparentes con un embudo. Antes, los alumnos prueban este licor para tener una idea de su sabor inicial y descubrir cómo les sorprenderá tres meses después cuando maceren las hierbas en el interior de la botella y esté apta para beber.

La botella se cierra de forma hermética con un tapón de plástico, se le pega la etiqueta con el nombre de cada participante y luego se sella con un plástico fundido con una pistola de calor que deber permanecer hasta el día que se beba. Con este proceso concluye el aprendizaje básico para elaborar el sabroso licor. A la alegría de haber elaborado sus propias hierbas, los asistentes le suman una nueva aventura aprendiendo también cómo se hace el famosos café caleta que luego tomarán como colofón a una mañana que comenzó lluviosa y acaba con un tímido sol al mediodía.

Esta excursión a la 'otra Ibiza' que promociona Joan Fluxà es una forma didáctica y práctica de conocer mejor el campo, las plantas y las tradiciones culinarias de la isla.