Antonio Marí Marí, vecino de Sant Carles, abrió el 18 de diciembre de 1943 su restaurante Ca's Pagès, un rincón que se ha convertido en emblema, icono y lugar de referencia de la cocina tradicional ibicenca y que sirve sofrit pagès, entre otros platos típicos, desde su apertura.

A sus 87 años, 'Toni de Ca's Pagès' revindica el respeto que merece la tradición gastronómica para no perder las recetas ancestrales y los sabores de la tierra y enarbola la bandera del auténtico sofrit pagès y cómo mantener la receta original que el mismo aprendió de expertas cocineras y cocineros de la zona de Sant Joan.

En los 47 años que lleva al frente de Cas Pagés han pasado expertos cocineros como su propia mujer Maria Ferrer quien reinó en los fogones durante quince años, aunque fue Paco Marí Ferrer, (Mesón de Paco) quien inauguró la cocina de Ca's Pagès, le siguió Juan Colomar 'Torrent' y el actual cocinero Toni Colomar, que se inició como pinche en la casa y lleva 40 años, preparando arroz de matances, ensalada payesa, cordero al horno y sofrit pagés a diario, como el primer día que Toni diseñó su primera carta de comidas.

Toni calcula que han servido más de un millón de platos de sofrit pagès en casi medio siglo y apunta: «Nadie se ha quejado nunca de esta plato, solo hemos obtenido alabanzas de los clientes habituales, residentes, extranjeros y famosos».

Fernando Rey, Niki Lauda, Cristiano Ronaldo, Giorgio Armani, Paco de Lucía, Keke y su hijo Nico Rosberg y el chef británico James Martín, son algunos de los rostros famosos que han degustado el sofrit de Ca's Pagès. Sus hijas Carmen y Lucía llevan la batuta actualmente y se apuntan a la defensa de la autenticidad y facilitan la receta celosamente guardada por la familia.

Toni regentaba la cantera y hacía pan, hecho este último que le convirtió en un personaje popular en la isla y especialmente en Vila: «Cuando llegaba a Eivissa con el pan y repartía con la camioneta a las 13 horas, las mujeres que esperaban el pan solían decir. «En nombre de Dios, menos mal que ha llegado el pagès,.. sempre arriba tard».

El éxito como empresario y emprendedor le animó a montar también el restaurante: «Pensé en hacer un restaurante porque todo lo que había iniciado hasta entonces me funcionaba. Entonces llamé a Paco y le dije: 'te doy el 50% del negocio si vienes a trabajar conmigo'».

Desde ese momento hasta ahora Toni sigue siendo un hombre de éxito y ha logrado mantener casi medio siglo un local de cocina ibicenca emblemático y de fama internacional.