Identificados los restos de la segunda víctima del penal franquista de Formentera

La primera víctima de la colonia militar franquista de la Savina se identificó el pasado noviembre

Isaac Rodríguez Lagar, segunda víctima identificada en es Campament de Formentera

Isaac Rodríguez Lagar, segunda víctima identificada en es Campament de Formentera / Govern

Redacción

Isaac Rodríguez Lagar es la segunda víctima mortal de la colonia militar franquista de la Savina que ha podido ser identificada en el cementerio de Sant Francesc, en Formentera, según informa el Govern. La primera de ellas en ser identificada el pasado noviembre fue Francisco Solano Vera, oriundo de Murcia.

Los restos fueron localizados durante la primera fase de exhumaciones y excavaciones del cementerio viejo de Formentera que impulsó el año pasado la Direcció General de Memòria Democràtica del Govern de les Illes Balears, en colaboración con el Consell de Formentera, en el marco del Tercer Plan de Fosses de les Illes Balears (2021-2022), con el objetivo de localizar un mínimo de 58 víctimas mortales que habrían muerto en el Penal entre el 1940 y el 1942.

La Sociedad de Ciencias Aranzadi llevó a cabo la intervención, que dio como resultado la recuperación de seis cuerpos compatibles por sus características con las víctimas del Penal.

Según el informe de identificación biológica realizado por el laboratorio BIOMICs de la Universidad del País Vasco (Vitoria-Gasteiz), la identificación de Isaac Rodríguez Lagar se hizo mediante la comparación genética de las muestras dadas por un hijo (José Rodríguez Rodríguez) y un nieto (Miguel Ángel Rodríguez Saavedra) suyos.

A pesar de que su hijo falleció, su hija, María Luz, y nieta de la víctima, que ha estado en contacto desde hace años con el Fòrum per la Memòria Historica d'Eivissa i Formentera, guardó cabellos de su padre por si eran útiles para la identificación.

Los restos de Rodríguez Lagar han sido recuperados en la sepultura 9 de la fila 5, al patio 2 del cementerio de Sant Francesc.

De acuerdo con la documentación de la época, recogida en un estudio del historiador ibicenco Antoni Ferrer Abárzuza para el Segon Pla de Fosses del Govern de les Illes Balears, Isaac Rodríguez Lagar murió en la colonia militar franquista de Formentera el 2 de junio de 1942 de desnutrición (como causa de muerte inmediata) y tuberculosis pulmonar (como causa remota).

El Quart Pla de Fosses i Memòria Democràtica de les Illes Balears (2023-2024) y Memoria Democrática de les Illes Baleares (2023-2024) prevé una segunda intervención en Formentera que buscará otras víctimas del Penal tal como aprobó la Comissió Tècnica de Fosses i Desapareguts del Govern.

Hasta hoy, en Baleares se han podido recuperar en total los restos al menos de 310 personas asesinadas durante la Guerra Civil y la represión franquista, de las cuales ya se han identificado 55 y se han devuelto 50 a sus familias.

Isaac Rodríguez Lagar

Isaac Rodríguez Lagar era campesino y tenía 44 años. Era hijo de Félix y Rosario. Estaba casado y era padre de seis hijos. Vivía en La Parra, en Badajoz (Extremadura). El 22 de diciembre de 1939 ingresó en la prisión de Zafra, en Badajoz, donde fue juzgado en el Consejo de Guerra y condenado a pena capital, más tarde conmutada por 30 años. El 18 de marzo de 1941 fue evacuado al Penal de Formentera, donde murió.

El Penal de Formentera

También conocido como 'La Colònia' o 'El Campament de la Savina', el penal de Formentera fue un centro penitenciario franquista abierto entre abril y mayo de 1940 y dependiente de la Prisión Provincial de Palma. Estaba destinado a personas ya sentenciadas por tribunales militares y se estima que, en sus dos años de existencia, llegó a albergar a 2.000 reclusos procedentes de todas las provincias de España.

Los presos internados y sentenciados a penas inferiores a 12 años eran autorizados a salir del penal para llevar a cabo trabajos y tareas. A los condenados a sentencias superiores se les reservaba reclusión o trabajo en el interior del propio campamento.

Todos ellos compartían unas condiciones de vida deplorables, caracterizadas por el hacinamiento, la insalubridad, las enfermedades y el hambre. Estas condiciones llevaron a la muerte a, al menos, 58 personas reclusas, una cifra constatada por la propia burocracia del régimen franquista.

Según los testimonios y documentos recogidos por este estudio, los muertos eran enterrados en el cementerio de Sant Francesc, que empezó a construirse en 1938 y fue inaugurado en 1940, poco antes de que se produjera la primera defunción documentada en el penal, en abril de 1941.

De acuerdo con este estudio, las muertes se sucedieron hasta octubre de 1942. "Cuando se producía una muerte, el cuerpo del finado era trasladado en carro, desde el penal y hasta la puerta de la iglesia, donde el párroco rezaba un responso ante el ataúd y de ahí seguían al cementerio", recoge el informe. Estos testimonios afirman que "a veces se ponía más de un cadáver en el mismo ataúd".

El penal cerró a finales de 1942, probablemente y según los estudios, ante el temor del régimen franquista a que la opinión pública internacional conociera la situación de horror que se vivía en Formentera. Los presos fueron entonces trasladados a otras penitenciarias.