La diputada Tania Marí, del PP, llevó ayer al Parlament balear la polémica en torno al proyecto de s’Estany des Peix, en Formentera, con «la impactante pasarela y los muertos de hormigón que ha instalado el Consell de Formentera en un espacio protegido», señaló. Y recordó que este lugar se encuentra dentro del Parque Natural de Ses Salines y dentro de la Red Natura 2000.

La popular denunció en su intervención que el proyecto que se publicitó no es el que se está ejecutando y pidió al Govern «si tiene pensado llevar a cabo actuaciones sancionadoras contra este despropósito o si mirará hacia otro lado». Añadió que «se anunció un sistema mixto de fondeos ecológicos y una pasarela con pantalanes flotantes para embarcaciones y los ciudadanos se preguntan dónde ha quedado esto».

El conseller balear de Medio Ambiente, Miquel Mir, explicó que el Govern había intervenido en la evaluación de impacto ambiental y había acompañado al Consell de Formentera en el desarrollo del proyecto, con el que se mostró totalmente de acuerdo. «Se ha dado un paso de gigante. Por primera vez hay un proyecto de reordenación, de contención y de regulación de las embarcaciones», añadió el conseller.

La diputada ibicenca recordó que se trata de un proyecto de 650.000 euros que salen del impuesto de turismo sostenible, para preguntar al respecto: «¿Considera que es sostenible esta infraestructura [la pasarela] y que no provocan ningún impacto todos los bloques de hormigón que han lanzado en s’Estany des Peix?». Desconocemos quién decidió modificar el proyecto, desconocemos quién es el responsable de este cambio sustancial y desconocemos si la conselleria balear de Medio Ambiente conocía estas modificaciones», añadió la diputada popular.