Alrededor de 500 personas se han concentrado esta tarde en la plaza de la Constitució de Sant Francesc, en Formentera, para protestar contra la nueva licitación de los quioscos de playa. Frente a la sede del gobierno insular, los actuales concesionarios, organizadores de la protesta, junto con vecinos que han querido mostrarles su apoyo, así como algunos representantes políticos, han guardado un minuto de silencio por la “muerte del modelo tradicional” tras la valoración provisional que ha hecho la mesa de contratación sobre las ofertas presentadas. Ninguno de los proyectos presentados por los anteriores gestores ha logrado la mejor puntuación, por lo que no obtendrían la concesión.
En la plaza se han desplegado pancartas que pedían "salvar el alma de Formentera" o que definían la isla como un "paraíso vendido". Desde la asociación de quiosqueros consideran que esta licitación ha sido "el último clavo del ataúd" del modelo turístico tradicional, ya que "han primado las ofertas económicas por encima de los proyectos y de la tradicional forma de llevarlos”.
A la protesta se han sumado algunos representantes políticos de GxF, socio de gobierno del PSOE en el Consell Insular, como la vicepresidenta segunda y consellera de Cultura y Educación Susana Labrador, la consellera de Juventud, Participación Ciudadana y Nuevas Tecnologías Vanessa Parellada y el conseller de Movilidad y Territorio Rafael González. En un comunicado enviado ayer, GxF informaba de que se sumaba a la protesta porque entendía la indignación de la población. Sin embargo, ante las críticas recibidas por ir contra su propio gobierno, esta misma mañana han tenido que aclarar que su presencia en la plaza era para "pedir disculpas y dar la cara" por no haber encontrado una solución mejor dentro del marco legal vigente.
También han asistido representantes de otros partidos políticos de la oposición como Lorenzo Córdoba y varios consellers de Sa Unió y José Manuel Alcaraz del PP de Formentera.
La presidenta del Consell, Ana Juan, se reúne con representantes de la asociación de concesionarios de playas
Horas antes de la convocatoria, la presidenta del Consell de Formentera, Ana Juan, se ha reunido con representantes de los concesionarios de playas, según han comunicado desde el propio gobierno insular. Juan ha querido explicar personalmente en que punto se encuentra la adjudicación de las nuevas concesiones y ha recordado que el proceso todavía está abierto.
La presidenta ha informado también que la comisión de gobierno ha pedido a la mesa de contratación "que revise los informes de viabilidad económica de cada una de las ofertas y también que pida un acta de titularidad real a las empresas presentadas al concurso público".
Esto es debido a que en todos los proyectos con mayor puntuación se superan los precios de salida. El que más llama la atención es el caso del quiosco de Cala Saona, cuyo precio de salida era de 20.000 euros y por el que la empresa ibicenca Mar y Sal SL ha ofrecido 173.500 euros al año.
