Los especialistas de la Sociedad de Estudios Aranzadi han iniciado la excavación de zona del cementerio de Sant Francesc donde fuentes orales apuntan que se habrían enterrado los cuerpos de los 58 republicanos presos en la Colonia Penitenciaria de Formentera ‘es Campament’, abierta por el régimen franquista entre 1940 y 1942 a la orilla de s’Estany des Peix, en la Savina. Allí murieron de inanición o por enfermedades derivadas de las pésimas condiciones en las que vivían 58 presos, la mayoría de Extremadura y de otras regiones, como Murcia.
La iniciativa se incluye en el Plan de Actuaciones en Fosas de la Guerra Civil y el Franquismo 2021-2022 que impulsa el Govern balear en colaboración con el Consell de Formentera y el Foro por la Memoria de Eivissa y Formentera.
La presidenta del Consell de Formentera, Ana Juan, y el secretario autonómico de Memoria Democrática del Govern, Jesús Jurado, junto con el vicepresidente del Foro por la Memoria de Eivissa y Formentera, Artur Parrón, han visitado el cementerio en donde está mañana trabajaba el personal de la Sociedad Aranzadi bajo la dirección de Almudena García-Rubio.
“Con esta actuación iniciamos una procedimiento por el que esperamos encontrar los restos de las 58 víctimas mortales de la Colonia Penitenciaria de la Savina, esperamos encontrar sus restos poder identificarlas y entregar lo que encontremos a sus familias para que de una vez por todas se puedan despedir de sus seres queridos”, ha manifestado la presidenta del Consell, Ana Juan.
El secretario autonómico de Memoria Democrática, Jesús Jurado, calificó el día “de muy importante” por el hecho de comenzar esta actuación incluida en el tercer Plan de Fosas que impulsa el Govern. Añadió que esta intervención se diferencia en varios aspectos de las llevadas a cabo en otros puntos de las Balears; uno de ellos es la cantidad restos de personas a las que se busca: “Son muchas las familias que hay detrás y que llevan muchos años esperando a que sus seres queridos desaparecidos se puedan encontrar, identificar y que sean retornados”.
“Son muchas las familias que hay detrás y que llevan muchos años esperando a que sus seres queridos desaparecidos se puedan encontrar, identificar y que sean retornados”
A juicio del Govern este tipo de iniciativas “son un deber democrático de cualquier gobierno que quiera cumplir con los derechos humanos, lo que es un trabajo primordial”.
Otras de las peculiaridades además de la cantidad de víctimas es que muchas de ellas, salvo “un par de ellas, proceden de otras comunidades como Extremadura y Murcia, lo implica un plus de dificultad a la hora de identificar a estas personas”, ha dicho Jurado.
Por eso ya se han establecido contactos con otros organismos como la Junta de Extremadura o con asociaciones memorialistas. De hecho el Foro por la Memoria de Eivissa y Formentera, tiene contacto con una quincena de familias, para que una vez hallados los restos de sus antepasados “se puedan recoger muestras de ADN para lograr la identificación que, al fin y al cabo, es el objetivo más importante de las políticas de Memoria”.
El secretario autonómico quiso ser prudente a la hora de asegurar resultados. “Tenemos esperanza, pero es una excavación compleja no sabemos si los encontraremos o no, por lo que hay que ser prudentes hasta que acabe esta investigación”. Calcula que en pocos días podrán saber si la excavación iniciada “tiene éxito o debemos esperar a buscar en otras zonas de este cementerio”.
La excavación
La directora del excavación, de la Sociedad Aranzadi, Almudena García-Rubio, ha recordado que siempre trabajan en coordinación con el Govern, con el Foro por la Memoria y en este caso con el Consell de Formentera que cubre la intendencia y facilita la logística “lo que nos facilita el trabajo”.
Ha reconoció que esta intervención “es distinta” porque no están buscando enterramientos extrajudiciales, sino están buscando “víctimas muertas en cautividad, es decir que los enterramientos pueden tener una forma más parecida a los enterramientos ordinarios”. Ha detallado que tienen por delante días de trabajo y que se enfrentan “al reto de distinguir a las víctimas de ‘es Campament’ de los enterramientos ordinarios, esperamos conseguir la suficiente información de campo como para poder anunciarlo, si el resultado es positivo”. Ha advertido que también tendrán que tomar muestras para hacer analíticas posteriores “por lo que las certezas igual llegan más tarde”.
En los trabajos iniciados han podido observar “que los enterramientos de los años setenta se produjeron a bastante profundidad, es decir que hay que cavar mucho, a mano, y tardaremos unos cuantos días en llegar a los niveles de la cronología que nos interesa”. A la directora le ha llamado la atención que el terreno donde están trabajando está “muy limpio, es decir que no encontramos huesos en el relleno y eso es buena señal, en metro y medio no hemos encontrado un solo hueso mezclado con la tierra es totalmente distinto a otros cementerios donde hemos trabajado”.
Artur Parrón, del Foro por la Memoria ha recordado que en todo este tiempo muchas familias de Extremadura y de Murcia han descubierto que sus antepasados murieron aquí: “Hay muchas familias a la expectativa de lo que podamos encontrar y ansiosas de tener información”, ha asegurado.
