El pleno ordinario del Consell de Formentera celebrado ayer aprobó, por unanimidad, instar a las compañías de suministro energético que operen en Formentera a que garanticen que las instalaciones particulares de energía fotovoltaica, tanto las nuevas como las ya existentes, puedan transferir los excedentes de producción a la red local, en cumplimiento de la ley. El conseller de Medio Ambiente, Antonio Sanz, defendió que «hay que democratizar la energía» y aseguró que, en Formentera, «las instalaciones existentes y las nuevas se encuentran con problemas para poder enviar a la red general la energía que no consumen, lo que podría hacer disminuir la demanda de energía en la central de es Ca Mari».

Recordó que esta medida «cumple con tres de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, como el de la energía asequible y no contaminante, el de la producción y consumo responsable y el de la acción por el clima».

De la misma forma el pleno aprobó, de forma definitiva, la ordenanza fiscal reguladora de la tasa de instalación, acceso y ejercicio de actividades y para autorizaciones temporales de establecimientos. El conseller de Territorio, Rafael González, destacó que «las tasas de inicio de actividades hasta final de año estarán bonificadas en un 50% y, con respecto a la tasa de cambio de titular y modificaciones simples, se reducirá en un 83,3%, pasando de pagar 1.200 a 200 euros».

Igualmente, con el apoyo de todos los grupos políticos, se aprobó la redacción de un plan de reorganización de espacios y usos de los edificios donde el Consell presta servicios públicos. El conseller de Gerencia, Rafael Ramírez, aseguró que «el Consell, dadas las necesidades y demandas de la ciudadanía, ha ido adquiriendo y habilitando en los últimos años edificios para ubicar allí los servicios que presta». Ramírez expuso que «es una realidad manifiesta la falta de espacios que están a disposición de nuestra administración». Por ello, añadió, «ahora, más que nunca, se hace necesario estudiar el uso y adecuación de los edificios y espacios públicos, con el objetivo de establecer las líneas de acción y las estrategias que hay que implementar».

Sa Unió

La oposición de Sa Unió no logró sacar adelante una propuesta que pedía la habilitación de más aparcamientos disuarios de los que ya hay en la Savina. Esta coalición aseguró que han recibido numerosas quejas de ciudadanos que tienen dificultades para estacionar sus vehículos en el puerto cuando acuden a sus lugares de trabajo. Sa Unió lamentó la negativa del equipo de gobierno insular ya que, según declaró el portavoz de la coalición, Llorenç Córdoba, «adecuando un terreno se podría dar solución a este grave problema» ocasionado, principalmente, por la reforma de la zona portuaria. Esas obras están en el origen del problema, según la oposición, ya «que, como consecuencia de ellas, se han eliminado muchas plazas de aparcamiento». El portavoz, Llorenç Córdoba, sostuvo que «la reciente actuación en la dársena de Llevant ha eliminado unas 50 plazas de aparcamiento, pasando de 82 a unas 30». Sa Unió considera que con este aparcamiento alternativo se conseguiría una mayor rotación de los vehículos en esta zona.