Formentera entrará el próximo sábado 30 de enero en la fase 4 reforzada de alerta sanitaria para intentar controlar la expansión del coronavirus, y tendrá entonces las mismas restricciones que sufre Ibiza desde hace más de dos semanas.

Así lo ha anunciado la consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, después de la reunión que ha mantenido con la presidenta del Govern, Francina Armengol, y la presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, en la que también ha asistido la consellera Gómez. En el encuentro se han evaluado los resultados de las medidas adoptadas hasta ahora en la isla, que se encuentra en nivel 4 de alerta y cerrada perimetralmente.

Con esta medida, las dos islas Pitiusas se sitúan en el mismo nivel de alerta, con el perímetro cerrado (controles en las entradas de pasajeros en puertos y aeropuertos) y con las restricciones del nivel 4 reforzados, que son:

Toque de queda: Se mantiene entre las 22 y las 6 horas, pero el Govern recomienda a la población que permanezca en sus casas, en la medida de lo posible, desde las 20 horas.

Restauración: Se suspende la actividad de cafeterías, bares y restaurantes, que solo podrán hacer servicio a domicilio y comer para llevar.

Reuniones: Se limitan las reuniones familiares y sociales a las personas que pertenecen al mismo núcleo de convivencia, tanto en espacios públicos como privados y tanto en el interior como el exterior.

Actividad comercial: Las grandes superficies (comercios de más de 400 metros cuadrados) tendrán que permanecer cerradas, excepto los Supermercados y establecimientos que suministren bienes esenciales. El pequeño comercio, no obstante, continúa como hasta ahora. Con el aforo del 30% y el cierre a las 20.00 horas.

Se suspende la actividad de gimnasios y spas y se prohíbe la asistencia de público a las competiciones deportivas.

La conselleria de Salud y Consumo analizará la conveniencia de llevar a cabo un cribado poblacional durante la segunda semana de febrero, en función de la evolución de los datos.

Evolución de la epidemia

En cuanto a los indicadores epidemiológicos, la incidencia acumulada a 14 días en Formentera se ha disparado en las últimas semanas y el 24 de enero llegó a un máximo de 1.048 casos por 100.000 habitantes, de acuerdo con los datos consolidados facilitados por el Servicio de Epidemiología. Desde el 6 de enero se han detectado 133 casos. También el 24 de enero la media del porcentaje de positividad de los 7 días anteriores se situaba prácticamente en un 22 %.

Estas cifras se encuentran muy por encima del umbral de los 60 casos por 100.000 habitantes y del 3% de positividad que el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) establece para definir un territorio en situación de riesgo.

En cuanto al número de reproducción instantáneo (Rt), a día 24 de enero era de 1,51 (por encima del 1 indica crecimiento) y el índice de potencial crecimiento epidémico (EPG) era de 1.582,1.

Desde el inicio de la estrategia de registro y vigilancia de brotes se han detectado 22 brotes que involucran a residentes de Formentera (con un total de 160 casos relacionados). El caso primario del primer brote validado se diagnosticó el día 11 de julio y el último el día 17 de enero.

A día de hoy, se encuentran en nivel 4 reforzado las islas de Mallorca e Ibiza, mientras que Menorca se encuentra en nivel 4 estándar.