La presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, junto a la portavoz del Govern, Pilar Costa, anunciaron ayer el pase de Formentera al nivel 4, de «riesgo extremo», de la alerta sanitaria por covid. La medida implica el adelanto del toque de queda a las 22 horas y restricciones que afectan sobre todo al sector de restauración.
La decisión se ha tomado a raíz del gran aumento de contagios, que ayer alcanzaban los 114 afectados activos en la isla y que se han triplicado en la última semana. «Son datos preocupantes, así como también lo es la alta ocupación hospitalaria, por eso hemos trasladado al Govern la necesidad de tomar nuevas medidas», justificó la presidenta del Consell.
Alejandra Ferrer recordó que hace una semana se anunció el cierre perimetral de la isla y desde entonces no se puede ni salir ni entrar si no es por un motivo justificado. Este hecho, según Ferrer, «ha reducido la movilidad entre las dos islas, lo que ayuda de manera directa a que haya menos contactos entre personas no pertenecientes a una misma burbuja, pero los efectos positivos traducidos en bajada del número de contagios aún no han llegado; por ello se ha hecho necesario tomar nuevas medidas restrictivas».
El nivel 4
El nivel 4
El pase a nivel cuatro implica una serie de restricciones sociales, como que las reuniones entre personas siguen siendo de un máximo de seis tanto en el interior, como en el exterior, pero sólo de un máximo de dos grupos de convivencia. Además, el toque de queda se adelanta de las 24 horas a las 22 horas, y se mantiene hasta las 6 de la mañana.
En cuanto al sector de la restauración, los interiores deberán permanecer cerrados y el horario máximo de cierre será también a las 22 horas, excepto viernes, sábados y vísperas de festivos que tendrán que cerrar a las 18 horas. Se puede recoger comida para llevar, sin acceso de los clientes al interior, hasta las 22 horas, y hacer envío a domicilio hasta las 24 horas.
Las actividades de carácter extraescolar organizadas por el Consell Insular quedan suspendidas. La biblioteca y el cine adaptan y rebajan sus aforos y la administración insular seguirá fomentando el teletrabajo, mientras garantiza que se den todos los servicios pero disminuyendo los contactos. La piscina sigue cerrada y el polideportivo cancela todas las clases colectivas y readapta todos sus servicios.
Reunión con la Pimef
Reunión con la Pimef
La vicepresidenta del Consell, Ana Juan, se reunió previamente con los representantes de la Pimef, que trasladaron sus inquietudes, reiterando la necesidad de bonificaciones tributarias (desde IBI a basuras) y de las ayudas económicas directas a las pequeñas empresas. La Pimef solicitó también ampliar un año más la prorroga de las licencias de estancias turísticas. También plantearon la importancia del proceso de vacunación para alcanzar la inmunidad de cara a la temporada turística.
