Los rastreadores de Salud han descubierto, tras varias jornadas de intenso trabajo, el origen del aumento de casos registrado en los últimos días en Formentera.
El presidente del Comité de Gestión de Enfermedades Infecciosas, Javier Arranz, detalló que las pistas conducen «a una comida familiar celebrada el día de Reyes». El experto aprovechó para explicar la facilidad con la que se «disemina» el virus.
Arranz narró que en la reunión, que se celebró en un restaurante, había una quincena de personas «sentadas en mesas de seis». Entre los comensales, detalló Arranz, había dos personas mayores, de más de 80 años, que al parecer estaban contagiadas. «Luego, algunas de estas personas, unos días después, se reunieron con otra parte de la familia, en el mismo restaurante», explicó el experto, que destacó que algunos de los contagiados en esas dos reuniones familiares, fueron a trabajar con normalidad a pesar de tener síntomas leves.
«Se juntan varias cosas: brotes y personas asintomáticas o con pocos síntomas que siguen haciendo reuniones pensando que eso no será coronavirus», indicó el portavoz del comité.
«Es covid, es lo que ahora tenemos. Si ahora alguien tiene síntomas de gripe, aunque sea un poco de tos, lo que tiene no es gripe, es covid», insistió el experto, que se mostró tajante: «Esa persona se tiene que quedar en casa, no ir a trabajar».
Javier Arranz afirmó que lo mismo que ha pasado en Formentera se puede repetir en cualquier momento en cualquier otro lugar. Por eso, reiteró una vez más la importancia de que la gente se relacione únicamente con un núcleo, ya que si se junta con una parte de la familia y al cabo de unos días con otros familiares o amigos, la posibilidad de que se expanda el virus se multiplica.