El temporal de viento del noreste, con rachas de hasta 40 kilómetros por hora, impidió ayer que el ferri 'Ramon Llull' de Baleària, procedente de Ibiza y que hace escala para seguir hasta Denia, pudiera atracar en el puerto de la Savina. De hecho lo intentó, pero las rachas de viento de Gregal se lo impidieron. Según fuentes de la compañía, en ese trayecto el barco no llevaba pasaje con destino a Formentera.

La compañía, en cambio, reubicó al único pasajero de Formentera que viajaba sin vehículo en el rápido 'Eco Lux', con salida de la Savina a Ibiza a las 9 horas, y desde allí en el 'Cecilia Payne', que zarpó a las 11 horas rumbo a Denia. También ofreció la alternativa de viajar en el 'Hypatía de Alejandría', con salida de Ibiza a las 14.15 horas con destino a Valencia.

Cuatro coches en tierra

Cuatro coches en tierra

En cambio, los ocho ocupantes de los cuatro coches que iban a embarcar en el 'Ramon Llull' ayer en por la mañana de Formentera a Denia se tuvieron que quedar en tierra ya que los trayectos de la mañana de los barcos que admiten carga entre las Pitiusas también fueron cancelados por las malas condiciones en el mar.

En principio, estos vehículos y sus ocupantes debían embarcar en el 'Nixe', con salida a las 12 horas, pero este buque, de carga y pasaje, también canceló sus enlaces a las 9 horas desde Vila y el regreso de las 10 horas.

Lo mismo le ocurrió al ferry 'Posidonia', que también transporta carga y pasaje, que canceló su enlace con salida de Ibiza a las 8 horas y de regreso a las 9.30 horas desde la Savina.

Pero a partir del mediodía las rachas de viento fueron amainando y estos buques volvieron a operar con normalidad a partir de las 13 horas.

A las 14.15 horas, coincidiendo con la salida del 'Posidonia' de la Savina, llegó el 'Ramon Llull' procedente de Denia con una decena de vehículos a bordo, con sus respectivos ocupantes. Como es habitual, se estableció un control sanitario en la Savina, donde se pedían las pruebas PCR.