La directiva de la Petita i Mitjana Empresa de Formentera ha analizado la situación derivada de la declaración de nuevo estado de alarma, «con el que estamos de acuerdo», dijo su presidente, Pep Mayans. Aunque en Formentera se da «una situación mejor que en otros lugares», en cuanto a la incidencia de contagios, «no entendemos que se haya decretado por seis meses», subrayó.

A juicio de la PIME, esa decisión significa «hipotecar o condenar la campaña de Navidad, la Semana Santa y puede tener consecuencias después». El presidente de la patronal recalcó «que cuando se da una noticia se tienen que medir sus repercusiones y qué pensará la gente».

Estas declaraciones tienen que ver con el hecho de que varios establecimientos ya han recibido llamadas de eventuales clientes para la temporada 2021 que preguntan: «¿Qué pasará?». Según la patronal, estos mensajes generan más incertidumbre e inquietud: «Debemos ir con sentido común y con cuidado cuando lanzamos mensajes».

Mayans recordó que en países de la Unión Europea también se han fijado medidas restrictivas pero no durante un periodo tan prolongado de tiempo: «Cada país establece confinamientos con horarios y normas diferentes pero al final con lo que se queda la gente es con el tiempo que duran». Como ejemplos dijo que «en Bélgica son dos meses, en Francia y Alemania es un mes pero con escuelas abiertas».

«Decir seis meses en España aunque sea una medida flexible a partir del 9 de noviembre, según comunidades, nos parece arriesgado porque condenamos dos campañas». A juicio de la patronal, las medidas restrictivas a la movilidad se deberían aplicar poco tiempo y «analizarlas para establecer plazos de aplicación más concretos y más cortos».

Una de las medidas que los empresarios consideran necesaria son los test en los países de origen de los visitantes y están convencidos de que es una medida que podría salvar la temporada 2021. Mayans manifestó: «Creo que si este invierno preparamos las infraestructuras y empezamos a hacer pruebas, será una buena herramienta para todas las islas».

El ejemplo de Canarias

Desde la PIME piden que se hagan test en origen «con todas las medidas complementarias en caso de detectar positivos». Mayans indicó que esta medida, que se aplica en Canarias, «no será una molestia para los visitantes, sino que será un plus más en sus vacaciones en el sentido de que saben que van a un territorio tranquilo». Por eso, consideran que el Govern balear se tiene que fijar en lo que han hecho en Canarias y recabar información de lo que pasa en ese archipiélago para aplicarlo después en Balears.

En cuanto a la promoción turística, Pep Mayans señaló que este invierno la campaña de promoción de Formentera será decisiva y que para ello tienen una reunión de la Comisión Turística la semana próxima, en donde se precisará de qué forma se desarrolla.

Respecto a las medidas aprobadas por el pleno del Consell, reduciendo el pago de tasas e impuestos, la PIME considera que «siempre pueden ser mejores, pero todo lo que es ayudar al sector es bueno, claro que la rebaja del IBI podría ser mayor», manifestó.