La isla de Formentera inicia hoy la fase 2 de desconfinamiento, tal y como acordó el Gobierno, lo que se traducirá en una sustancial flexibilización de las restricciones que aún imperaban con la fase 1 y acercan cada vez más una situación de normalidad en la vida cotidiana, salvedad hecha de las comunicaciones por vía marítima con Ibiza y el resto de puertos.
La presidenta del Consell de Formentera se limitó a agradecer el comportamiento cívico de la población y de los empresarios, a quienes atribuyó este avance en el camino de la desescalada. La institución ha editado unos carteles informativos para dar a conocer las medidas más relevantes que serán de aplicación a partir de ahora.
Las principales novedades respecto a la situación anterior y que hoy entran en vigor consisten, por ejemplo, en que «se permite el uso lúdico y bañarse en las playas», según rezan dichos carteles. Termina así un capítulo que ha dado lugar a numerosas confusiones y rectificaciones de criterio en Formentera.
Del mismo modo, «se permiten ceremonias nupciales con un máximo de 50 personas si se celebran en un lugar cerrado y de 100 si es en un lugar abierto». Se deberá respetar el aforo del 50%, añade el Consell de Formentera.
En esta fase 2 del plan de desescalada estará también previsto que se pueda retomar la actividad de la caza y la pesca deportiva; así como que el turismo activo y de naturaleza se amplíe para grupos más amplios de personas.
Pep Juan Torres pescador de es Caló, ha salido hoy a pescar después de tres meses. Ha pescado para hacer hoy un bullit y arroz y ha regresado a puerto con lo que había salido a buscar.
Asimismo, los velatorios podrán tener hasta 15 asistentes en espacio cerrado y 25 en lugares abiertos. Los centros de culto aumentan su aforo hasta el 50%.
Las reuniones en grupo, a partir de ahora, podrán ser de hasta 15 personas, frente a las diez de la anterior fase.
Navegación recreativa
En cuanto a la navegación recreativa, ésta se permite siempre que no se supere una distancia de 12 millas desde el puerto base y sin atracar en otro puerto que no sea el de salida. Se permite asimismo el alquiler de barcos chárter.
En el sector de la restauración, se permite al fin el acceso al interior de los establecimientos, pero respetando siempre un determinado aforo (un 40%) y con los clientes sentados y respetando la separación necesaria. Queda prohibido servir en la barra. En los hoteles y similares se permite abrir las zonas comunes, a un tercio de su aforo.
En los pequeños comercios, el aforo deberá ser del 40%, según establece la orden ministerial publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que igualmente habilita a practicar la pesca y la caza.
Las piscinas recreativas, por otro lado, podrán funcionar al 30% de su capacidad y mediante cita previa.
Se permite la realización de congresos, encuentros, reuniones de negocio y conferencias en pabellones de congresos, salas de conferencias, salas multiusos y otros establecimientos e instalaciones similares. El tope es de 50 asistentes y se insta a promover la participación no presencial.
