El pleno del Consell de Formentera aprobó ayer por unanimidad el Plan de Gestión del Patrimonio Cultural, que se desarrollará en los dos próximos años y que incluye el proyecto de 'museización' de la casa de Can Ramon, como sede de la colección etnográfica del futuro Museo de Formentera, y la adquisición y recuperación de es Campament de la Savina. Este espacio fue una colonia penitenciaria franquista entre 1940 y 1942 por la que llegaron a pasar unos 2.000 prisioneros republicanos, 58 de los cuales murieron de hambre y de enfermedades derivadas de las pésimas condiciones del cautiverio.

El plan, calificado de «ambicioso» por la oposición de Sa Unió y de «realista» por la consellera de Patrimonio, Raquel Guasch, también contempla una auditoría sobre el estado de las torres de defensa y el mantenimiento de diversos elementos de importancia patrimonial, como aljibes y pozos.

Guasch explicó que el plan se divide en cinco capítulos y comienza con la reorganización del área con la creación del Consell Asesor del Patrimonio Inmaterial, que recogerá todo el Patrimonio no físico como las glosas, la música y el folclore. También está prevista la finalización del catálogo de caminos rurales y la redacción del Plan Especial de Protección de las Salinas de Formentera. Este último proyecto se basa en que toda la actividad salinera y los elementos arquitectónicos que conformaban esa antigua industria están declarados Bien de Interés Cultural (BIC).

En materia de investigación se aumenta la dotación de la beca que el Consell convoca cada año, relacionada con estudios científicos locales, que pasa de 6.000 a 8.500 euros. Asimismo, está previsto, en el apartado de protección, la declaración como BIC del Molí d'en Teuet, en Sant Ferran, y del Molí d'en Botigues, en la Mola.

Derecho a la educación

Derecho a la educación

Donde no hubo acuerdo unánime (Sa Unió se abstuvo) fue en la declaración propuesta por el equipo de gobierno «a favor del derecho a la educación y la libertad de enseñanza», donde la oposición, tras afirmar que suscribía toda la propuesta, pidió que se retirara un párrafo en el que se cita a «los partidos de la derecha, ciertos partidos», como los inductores de un conflicto en la comunidad educativa en relación al 'pin parental'. El portavoz de la oposición, Lorenzo Córdoba, consideró que «ese párrafo tiene un marcado carácter partidista» al referirse a la derecha.

En el debate de este punto fue cuando se produjo la mayor tensión entre oposición y gobierno. Lorenzo Córdoba preguntó a la consellera de Educación y Cultura, Susana Labrador: «¿Cree usted que una persona que dirige un instituto puede estar en contra de la Constitución y del Estatut d'Autonomia?». A lo que Labrador contestó perpleja que en las tomas de posesión de los cargos públicos, las distintas fórmulas que se usan para jurar o prometer «son legales y están admitidas», recordando que la consellera Guasch, a la que se refería Córdoba sin citar, juró con la muletilla del «imperativo legal».

Además, se acordó por unanimidad y a propuesta del conseller de Medio Ambiente, Antonio Sanz, solicitar al Govern la sustitución de toda la red de saneamiento general, en gran parte de fibrocemento.

Sanz se refirió a los últimos vertidos fecales registrados en el colector que rodea s'Estany Pudent, en el Parque Natural, cuya reparación está a la espera de la llegada de piezas a medida.