La Guardia Civil del Mar, a bordo de la patrullera 'Sa Costera', denunció en la tarde de ayer a un yate de 30 metros de eslora, el 'Svetlana', de bandera australiana, al estar fondeado sobre la pradera de posidonia de ses Illetes, en el Parque Natural de ses Salines, en Formentera.

Previamente, el servicio de información y asesoramiento para el fondeo, que depende del Govern balear, indicó hasta en dos ocasiones a la tripulación, de nacionalidad rusa, que estaban mal fondeados y que debían mover el barco a una zona con fondo de arena.

Ante la negativa a seguir las instrucciones, fue requerida la presencia de la patrullera 'Sa Costera'. Los miembros de la Guardia Civil del Mar llegaron a la zona y comprobaron que efectivamente el barco estaba dañando la posidonia, por lo que levantó un acta de denuncia. Con la presencia de la Guardia Civil y ante su requerimiento de mover su posición, el 'Svetlana' cambió de sitio para luego fondear de forma correcta.

El decreto de Posidonia, que entró en vigor en julio del pasado año prohíbe expresamente el fondeo sobre posidonia en aguas de Balears. Este decreto aplica un régimen sancionador en base a dos normas: la ley autonómica para la conservación de espacios de relevancia ambiental (LECO) de 2005 y la Ley estatal de Patrimonio Natural y Biodiversidad de 2007.

Estas normantivas contemplan multas de entre 100 y 6.000 euros por infracciones leves, hasta 100.000 euros por las graves y un máximo de 450.000 euros para las calificadas como muy graves.