El pleno extraordinario del Consell de Formentera resolvió ayer temas de vital importancia para el futuro desarrollo económico y social de la isla, con la aprobación definitiva de la modificación, número tres, del Plan Territorial Insular (PTI) que fija el techo máximo de camas turísticas en 20.500. Esto implica la creación de una bolsa de 5.000 camas de estancias turísticas (casas y pisos de alquiler) que podrán empezar a inscribirse oficialmente tras la publicación en el Butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) de la citada normativa, prevista para la próxima semana.

Además, se fijan las zonas en las que se podrá desarrollar la actividad de alquiler de estancias turísticas, excluyendo de las mismas los cascos históricos de Sant Francesc (incluido ses Bardetes), Sant Ferran y el Pilar de la Mola, que quedan para el alquiler residencial.

Pero la novedad es que la Comisión balear de Medio Ambiente emitió un informe desfavorable, y por lo tanto vinculante, que no permite alquilar estancias turísticas en casas ubicadas en Red Natura 2000 y en el área del Parque Natural de ses Salines con sus zonas periféricas, tal y como planteaba en un primer momento el Consell.

Esta cuestión fue rebatida por el portavoz del grupo del PP, José Manuel Alcaraz, al considerar que la prohibición de comercializar estancias turísticas en estas zonas supone «una modificación sustancial que afecta a decenas de personas» y que, a su juicio, debería llevar a devolver toda la tramitación a la casilla cero. Por eso, pidió que se abriera un nuevo periodo de exposición pública.

Mientras, el conseller del PSOE, Rafa Ramírez, se mostró de acuerdo con el equipo de gobierno y criticó la actitud del PP, ya que considera que esta normativa permitirá que algunos propietarios opten por el alquiler residencial con contratos anuales y así se liberen pisos para los trabajadores.

Los tres consellers del PP (falta Enrique Llorenç desde febrero por motivos personales), votaron en contra de esta modificación del PTI y las dos conselleres de Compromís, partido socio de coalición del PP, bajo el sello de Sa Unió para las próximas elecciones locales, excusaron su ausencia por motivos personales.

Los siguientes puntos de la sesión giraron en torno a la normativa que regulará, a partir de la publicación en el BOIB, el alquiler de estancias turísticas en Formentera. Esto incluye el Plan de Calidad Turística, heredado desde 2005 y posteriormente modificado. Este plan establece requisitos básicos de mobiliario, higiene y estado general de la vivienda y otros medioambientales, todos ellos debatidos en el Consell d'Entitats y que incluyen medidas de ahorro energético.

En resumen, son 26 requisitos indispensables y 20 evaluables, de los que deben cumplirse 14 para poder obtener la declaración responsable de inicio de actividad turística (Driat). La consellera de Turismo, Alejandra Ferrer, avanzó que durante este verano los inspectores cotejarán la declaración firmada con la realidad.

Tasas a estancias turísticas

Tasas a estancias turísticas

El pleno aprobó, de forma definitiva, dos tasas relacionadas con la aplicación de la nueva normativa que regula las 5.000 camas de estancias turísticas. La primera es de 300 euros por nueva inscripción. En este punto el PP sumó su voto favorable al de GxF y PSOE.

El segundo impuesto aprobado, con las abstención del PP, tuvo que ver con el precio público de adquisición de plazas de estancias turísticas que deberán abonar los comercializadores y que se fijan en 70 euros la primera y de forma progresiva un 5% más por las que se añadan, hasta llegar a un máximo de 12 camas.