Mucha expectación hubo anoche en la Casa del Poble de la Mola, con motivo de la reunión informativa sobre la normativa y disposiciones de la recién creada Reserva Marina de la Punta de sa Creu. La reunión fue promovida por el área de Agricultura del Consell de Formentera y la propia Cofradía de Pescadores, con el objetivo de dar respuesta a las dudas de los pescadores recreativos que acostumbran a faenar por esas aguas.

Al acto asistió el conseller insular de Medio Rural y Marino, Bartomeu Escandell, juntamente con el director general de Pesca del Govern balear, Joan Mercant, y el jefe de servicio de Pesca del Govern balear, Toni Garau.

Minutos antes de la reunión, Mercant explicó que la normativa de la Reserva de sa Punta de sa Creu, igual que las del resto de la Comunidad Autónoma, afecta a los pescadores de recreo en el arte de pesca. Por eso los únicos aparejos permitidos son el volantín/caña (máximo una línea por pescador), la potera (máximo una línea con dos poteras por pescador) y el curricán de superficie o fluixa (máximo dos líneas por embarcación).

También se fija un periodo de tiempo en el que se hace una parada y se impide la pesca entre los meses de abril, mayo y junio, «igual que los profesionales que tienen unos meses que tampoco pueden pescar que son noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo», precisó Mercant.

A partir de ahora los pescadores recreativos tendrán que cumplimentar «una declaración de capturas», a través de una aplicación que ya está disponible, donde se debe decir el número de tripulantes, la fecha de la salida y el número de piezas y especies capturadas, incluso admite que se realice una foto como prueba. Aquellos que no dispongan de teléfonos inteligentes pueden hacerlo directamente rellenando un impreso. En cuanto a la cantidad de capturas máxima es la misma que si se pesca fuera de la reserva, cinco kilos.

Todos aquellos que quieran faenar en esta zona deberán obtener un permiso especial para la reserva marina de la Punta de sa Creu. La autorización es gratuita pero les compromete a dar información sobre su actividad en estas aguas. Mercant detalló que para pescar en las reservas es necesario obtener «un permiso especial que tiene una vigencia de dos años». Recordó que la tramitación se puede realizar directamente a través de la web de la dirección general de Pesca.

Joan Mercant señaló que por la experiencia que tiene después de la declaración de varias reservas marinas, como la de Tagomago, en Ibiza, «las incertidumbre, y hablo de la pesca recreativa, es pensar que 'ahora no nos dejarán pescar', y en realidad, al final son los que más contentos están y esto lo hemos observado en otras reservas, aquí el que puede estar enfadado es el que quiera abusar, pero no la mayoría».