Formentera está siendo urbanizada a pasos agigantados. Así lo pone de manifiesto el balance de licencias de obra nueva (no reformas) que ha publicado el Institut Balear d'Estadística (Ibestat) y que demuestra que esta es la isla de la Comunitat Autònoma que más presión urbanística sufre, superior incluso a Ibiza, proporcionalmente a su territorio.

En el periodo que va desde 2000 a 2016 (último año con datos completos disponibles), el Consell que gobiernan los progresistas de Gent per Formentera (GxF) ha aprobado 178 construcciones de todo tipo, desde garajes hasta edificios plurifamiliares, lo que supone un promedio de 11,1 edificios al año, casi uno al mes.

Casi todas estas construcciones son viviendas unifamiliares diseminadas en suelo rústico, pero también hay otros inmuebles de tipo industrial, comercial o infraestructuras públicas.

Sólo en el periodo comprendido entre los años 2012 y 2016 el Consell aprobó 79 edificios, y llama la atención el hecho de que en un año concreto, 2014, la isla pulverizó todos los récords al otorgar en un solo año 29 licencias.

Este ritmo de edificación sobre una isla de exiguas dimensiones (83,2 kilómetros cuadrados) se aprecia aún mejor al analizar la superficie que representan estas 178 construcciones. En concreto, suponen 82.230 metros cuadrados, una superficie que, a modo de comparación, se aproxima bastante a la que tiene s'Estany des Peix.

En 2014 se aprobaron licencias que equivalen a 10.500 metros cuadrados de superficie construida, según los proyectos autorizados. Fue ese año cuando se aprobaron 29 construcciones.

El número de viviendas que representan todas estas casas es de 457. En el año 2001 se crearon 79 nuevas viviendas (se aprobaron varios edificios plurifamiliares), 65 en 2000 y 63 en 2008. Son los años en que se produjo un mayor aumento en el número de viviendas, según los datos ofrecidos por la citada estadística del Ibestat, basada siempre en las licencias aprobadas por los ayuntamientos.

Formentera no informa

Este diario ha tratado sin éxito, desde el pasado 2 de octubre, de obtener la opinión del Consell de Formentera sobre este hecho o la explicación que encuentra a este crecimiento urbanístico. La consellera de Urbanismo, Alejandra Ferrer, no ha llegado a atender esta solicitud, reiteradamente formulada por este periódico a lo largo de todas estas semanas.

Del mismo modo, el Consell de Formentera tampoco ha facilitado el número de licencias otorgadas en los últimos años en Área Natural de Especial Interés (ANEI) de Formentera, una información de acceso público por tratarse de expedientes ya concluidos. Sucesivos pretextos han sido empleados por el Consell para no proporcionar este dato.

Los datos hechos públicos por el Institut Balear d'Estadística sobre el urbanismo en las Pitiüses ponen de manifiesto que la presión urbanizadora se está trasladando en los últimos años a los municipios de Sant Joan, Formentera y Santa Eulària, si bien este último nunca ha dejado de ser un festín para promotoras e inmobiliarias.

De estos datos se desprende que Formentera es la isla de Balears donde se produce una mayor presión urbanística, atendiendo al número de licencias aprobadas y a su superficie.