La biblioteca Marià Villangómez, de Formentera amaneció ayer (después de la noche de Halloween) con todos los cristales de las ventanas que dan a la fachada principal rotos. Todo indica que pueda ser fruto de un acto vandálico realizado por menores de edad y que se sucedieron durante la noche del jueves al viernes. La fachada del edificio que alberga la biblioteca y la Escuela de Música también fue manchada por el lanzamiento de huevos.

Además, en la pasarela de acceso a la escoleta sa Miranda aparecieron pintadas y garabatos con dibujos obscenos.

Pero esa violencia gratuita no quedó ahí, ya que el vehículo de una profesora del IES Marc Ferrer, estacionado en el aparcamiento del Cementerio viejo de Sant Francesc, y un Land Rover sufrieron desperfectos, con ventanillas rotas.

La brigada de mantenimiento del Consell de Formentera limpió la biblioteca y una carpintería externa cerró con chapa marina las ventanas para asegurar el recinto mientras se cambian todos los cristales. Debido a este acto vandálico, el servicio de Telecentro se suspendió ayer tarde y también queda sin poder usarse el sector más cercano a las ventanas de la biblioteca.

La Policía Local de Formentera ha abierto una investigación a través del Policía Tutor, ya que se sospecha que los autores podrían ser jóvenes menores de edad. El Consell anuncia que tomará medidas para evitar este tipo de actos.