S'Estany des Peix lleva años convertido en un puerto de facto para embarcaciones de pequeño calado. Para disminuir la erosión que provoca esta actividad en el fondo de este punto del Parque Natural de ses Salines, el Consell de Formentera propone instalar pantalanes flotantes y fondeos de bajo impacto para regular el fondeo con «boyas ecológicas».

El proyecto tiene un coste de más de 650.000 euros (más IVA), que el Consell pretende sufragar con la ecotasa. En total, Formentera ha pedido casi 1,5 millones de euros del fondo del Impuesto sobre Turismo Sostenible. Con los restantes 764.000 euros, se construiría el centro de deportes náuticos y se reubicaría la escuela de vela, que también se encuentra a orillas del estanque.

«La regulación de los fondeos es necesaria para poder continuar con el uso tradicional del resguardo de embarcaciones pequeñas y la preservación del medio natural», dijo el Consell ayer en un comunicado.

La institución busca, por un lado, «recuperar la calidad medioambiental de s'Estany des Peix» y, por el otro, «desestacionalizar la temporada turística e impulsar la oferta de turismo náutico activo durante la temporada baja», continúa la nota de prensa. Además, este espacio público se destinará a la formación sobre el respeto al medio ambiente marino.

En ambos casos, como apunta el gobierno insular, la inversión iría destinada a responder a necesidades que existen durante todo el año, pero que se acentúan en la época de verano.

La saturación de s'Estany des Peix, tradicionalmente usado por los formenterenses para resguardar barcos que calan menos de 80 centímetros, se ha convertido en una queja recurrente de los vecinos de la Savina. Los barcos amarran en decenas de muertos de hormigón y la actividad allí aumenta cada año.

El presidente del Consell, Jaume Ferrer, ya puso la regulación para el fondeo de 320 embarcaciones en s'Estany como una de las prioridades para este año. El proyecto de regulación de los fondeos está paralizado a falta de un acuerdo entre la Demarcación de Costas y el Govern.

Conflicto con los hoteleros

La Federación Empresarial Hotelera de Ibiza (Fehif) ha criticado el impuesto de la ecotasa de forma reiterada y, a principios de verano, aseguró que el aumento de su coste este año provoca situaciones de conflicto con los clientes, porque muchos, aseguran, lo consideran abusivo. El importe del impuesto se ha duplicado.

El Govern recaudó 64 millones de euros a través de la ecotasa en 2017, un 57% más que el verano anterior, según anunció el Ejecutivo balear en febrero.