En 2012 el biólogo y fotógrafo submarino Manu San Félix inició un proyecto para que los navegantes tuvieran claro dónde poder fondear en Formentera sin hacer daño a las praderas de posidonia. Decidió entonces contar con la empresa Oceansnell para cartografiar al detalle el tesoro natural que esconden los fondos marinos y que desde tierra no se ve, la Posidonia oceanica.

Desde 1992, cuando llegó a esta isla, San Félix ha intentado dar a conocer y divulgar la importancia de esta planta marina y fue el encargado de redactar la justificación ante la Unesco para incluir este bien natural en la declaración de Ibiza Patrimonio de la Humanidad, en 1999.

Pero también denunció las agresiones registradas en los últimos años a esos fondos marinos, cuando las aguas de Formentera se convirtieron en la atracción del Mediterráneo para el turismo náutico casi al mismo tiempo que aumentó la población insular.

La imagen del ancla del súper yate 'Turama' arrasando una pradera de posidonia del tamaño de un campo de fútbol, de la que es autor y que publicó Diario de Ibiza, sigue en la retina y la memoria de muchas personas.

De la misma forma, documentó el vertido de aguas fecales a la salida del emisario de la Savina, en es Caló de s'Oli, en pleno Parque Natural de ses Salinas. Un escándalo, también denunciado por este periódico, que fue parcheado en su momento, pero que sigue pendiente de una solución definitiva.

En todo ese tiempo San Félix también ha realizado una labor divulgativa muy importante, especialmente a través de la imagen y ha ampliado su pasión a otras latitudes del planeta. Lleva varios años trabajando como cámara submarino y director de documentales de National Geographic para la serie 'Pristine Seas'.

Pero ayer estaba especialmente feliz al presentar, después de varios años de trabajo, la cartografía detallada de las praderas de posidonia que rodean Formentera. Dejó claro que aún quedan dos zonas por cartografiar: una en es Caló y la otra en Cala Saona. Pero que el perfil de la mayoría de las praderas de posidonia ya está registrado en este trabajo, que se apoya también en la plataforma Google Earth. Las zonas ya completadas son todo Migjorn, ses Illetes, s'Espalmador, Llevant, y Tramuntana. De esta forma, cualquier tripulación que fondee en estas aguas sabrá exactamente que tiene debajo.

El fondeo sobre las praderas de posidonia está prohibido actualmente en aguas del Parque Natural de ses Salines y de cualquier zona marina protegida de las Balears. En estos momentos el Govern balear trabaja en un decreto ley para proteger esta planta marina.

La presentación

La presentación

El acto de presentación se celebró en el restaurante Juan y Andrea, en ses Illetes, una de las empresas que ha apostado por este proyecto. A la presentación asistieron los principales patrocinadores, la consellera insular de Medio Ambiente, Daisee Aguilera; el vicepresidente del Consell, Bartomeu Escandell; la directora del Parque Natural de ses Salines y el conseller del PP, Juanma Costa, que también es presidente de la Cámara de Comercio de Ibiza y Formentera. También hubo presencia de representantes de la Fundación Abel Matutes y de varias empresas relacionadas con el sector náutico como Marina Ibiza, Marina Formentera. El proyecto está apoyado además por marcas como Loewe, Kavra de Formentera, Oceanic Global y TagHeuer, sin olvidar la Asociación Vellmarí que preside Manu San Félix.

Posidonia Maps

Posidonia Maps

La presentación corrió a cargo de Sandra Benbeniste, directora de la Fundación para la Conservación de Ibiza y Formentera, que empezó diciendo que el día era «emocionante», y lo justificó señalando la presencia «de instituciones, entidades y empresas que han participado y dado apoyo a la iniciativa que persigue conjugar protección del entorno con turismo», en este caso náutico.

Benbeniste destacó que Posidonia Maps es «una solución práctica para proteger la posidonia y a la vez disfrutar». Recordó que detrás de este proyecto «hay mucha ciencia y varios años de trabajo pero además hay la voluntad de que sea una herramienta útil que se pueda difundir al máximo».

Manu San Felix destacó, en su breve intervención, la importancia de la conservación de la posidonia: «Es muy importante porque la necesitamos para vivir nosotros, nuestros hijos y nuestros nietos y el mensaje es que esto es posible gracias a todas las marcas e instituciones que han creído en este proyecto».

Vicente Taso, director de Oceansnell, explicó que cuando iniciaron la prospección con un sonar de barrido lateral detectaron «bastantes zonas [de posidonia] degradadas, con marcas de garreo». Detalló que su trabajo ha consistido en detectar la distinta naturaleza de los fondos para comprobar sus características. Tras analizar esos datos distinguieron qué zonas eran de pradera y cuales no. A partir de allí empezaron a cartografiar las zonas «donde había más presión de barcos» hasta completar toda la vertiente sur y norte de la isla.

La consellera de Medio Ambiente de Formentera, Daisee Aguilera, destacó el esfuerzo de las administraciones y de la sociedad civil en este proyecto. Agradeció especialmente a Manu San Félix su trabajo y subrayó la utilidad de la herramienta por toda la información que implica, para finalmente recordar: «Nadie viene a destruir [la posidonia], todos venimos a disfrutar y es importante que esta cartografía pase a las cartas náuticas». «Ese es otro de los objetivos para proteger lo que tenemos en nuestras aguas».