Las fiestas patronales de Sant Francesc de s'Estany se convirtieron ayer en un reclamo para decenas de turistas que, de camino a la playa de ses Salines, decidieron detenerse un par de horas para descubrir qué se 'cocía' en la pequeña parroquia situada junto a los estanques. No tuvieron que esperar mucho para saber, gracias a las explicaciones de algunos lugareños, que allí se celebraba el día de San Francisco de Paula, patrón de la localidad.

Entre los curiosos que se unieron a la fiesta estaban Justina y Vicente, residentes en Valencia y amantes del senderismo. La pareja, que había iniciado su paseo a pie en Platja d'en Bossa, decidió detenerse a mediodía en Sant Francesc atraída por el público que se congregaba a la entrada de la iglesia del pueblo. Además de visitar el interior del templo, construido en el siglo XVIII para que los salineros pudieran acudir a misa, Justina y Vicente admiraron de cerca los trajes típicos que llevaban los componentes del Grup Folklòric Sant Jordi de ses Salines y aprovecharon para hacerse unas fotos con ellos. La pareja valenciana, que elogió la belleza de la isla, también quiso hacer una sugerencia. «Habría que hacer más rutas de senderismo, eso atrae mucho turismo en invierno y primavera», propusieron.

Como comentaban algunos de los habituales a la fiesta, entre ellos el obrero mayor, Toni Serra Marí Margalí, este año la celebración fue «doble» porque el 2 de abril coincidió con día no laborable y no fue necesario, como es habitual, posponer los festejos al domingo siguiente.

El evento, en el que no faltó presencia política, comenzó a las 12 horas con una misa, que se prolongó durante casi una hora. La iglesia ya estaba llena hasta los topes media hora antes de que comenzara la ceremonia religiosa, oficiada por el párroco Marcelo Gabriel Jofré.

La procesión

Tras la misa, comenzó la procesión, que obligó a cerrar el tráfico de la carretera de ses Salines durante aproximadamente quince minutos. Los obreros de la parroquia sacaron para la ocasión la imagen de San Francisco de Paula, que encabezó la comitiva, junto a las tallas de San Juan, el Corazón de Jesús, la Purísima y la Madre de Dios de Fátima. Durante todo el trayecto no pararon de sonar las campanas de la iglesia.

Cuatro agentes se encargaron de detener los vehículos mientras pasaban por el asfalto los integrantes de la procesión, entre ellos el jefe de la Policía Local de Sant Josep, Jaime Ramon Planells, que, por cierto, nació en una casa de Sant Francesc de s'Estany y fue bautizado en la iglesia de la localidad. También nació muy cerca de la parroquia, en es Codolar, la primera teniente de alcalde de Sant Josep, Paquita Ribas, que asistió junto al alcalde del municipio y buena parte de la corporación municipal al evento festivo.

El pasado de Sant Francesc

Tampoco se quiso perder la celebración Cati Cardona, una ibicenca que nació justo en frente de la iglesia. Sant Francesc de s'Estany fue su lugar de residencia hasta los 9 años. Por aquel entonces, recordaba, «la localidad estaba llena de vida ya que la salinera estaba a pleno rendimiento». En la época en la que ella era una niña no había luz eléctrica en la zona ni tampoco líneas de autobús. Cati tenía que coger cada día una bicicleta para ir a la escuela que por aquel entonces se levantaba muy cerca del aeropuerto.

Mucho han cambiado las cosas desde entonces en Sant Francesc de s' Estany, aunque las fiestas patronales son similares a las de hace unas décadas.

Francisco Cardona también conoce bien la parroquia. Hace casi 41 años se casó allí. «Por fuera la fachada de la iglesia era igual, pero por dentro ha mejorado mucho, antes el coro parecía que se caía y la zona del altar era un poco oscura», recordaba ayer durante los actos festivos.

Siguiendo con atención la ceremonia religiosa estaba Cecilia, vecina de ses Salines desde hace 11 años. Esta argentina, que se siente ibicenca de adopción, acudió con un amigo suizo que está de vacaciones en la isla para mostrarle cómo es una fiesta tradicional en la isla.

Descubriendo ses Salines

No fueron pocos los turistas que, además de seguir la celebración, aprovecharon para acercarse a la casa rectoral y visitar la exposición del centro de interpretación del Parque Natural de ses Salines, que en estas fechas sólo está abierto sábados y domingos. Allí pudieron conocer cómo ha evolucionado la explotación salinera y los valores naturales de la zona.

La fiesta concluyó con una demostración de ball pagès del Grup Folklòric Sant Jordi de ses Salines que siguieron atentamente los asistentes mientras disfrutaban de un sabroso aperitivo compuesto de flaó, orelletes y vino dulce.

Los actos festivos de Sant Francesc de s'Estany, que se iniciaron el pasado domingo por la noche con un concierto, continuarán el próximo domingo, 8 de abril, a partir de las 17 horas en es Pou des Carbó, en ses Salines. Integrantes del Grup Folklòric Sant Jordi de ses Salines bailarán junto a este pozo del siglo XVIII que fue restaurado a principios de 2016.