La Instalación Desaladora de Agua de Mar (IDAM) de Formentera ha ampliado su capacidad de producción de 4.000 a 7.000 metros cúbicos (m3) diarios tras las obras de remodelación y ampliación de la planta.
Según ha informado el Govern balear, el conseller de Medio Ambiente, Vicenç Ferrer, ha visitado hoy la infraestructura acompañado por el presidente del Consell de Formentera, Vicenç Vidal.
Las obras, impulsadas por la Agencia Balear del Agua y la Calidad Ambiental (Abaqua) han costado 1.748.340 euros y han consistido en la construcción de dos líneas nuevas con capacidad para producir 2.000 y 2.500 m3 diarios, respectivamente.
Las nuevas líneas sustituyen a las antiguas, que producían 1.000 m3 diarios de agua desalada cada una, mientras que una línea de producción de 2.000 m3 se mantiene de reserva.
De esta forma, la desaladora tiene una capacidad total de producción de 7.000 m3 diarios, aunque la capacidad simultánea de producción máxima será de 5.000 m3 al día.
"Mejoramos en capacidad y seguridad de generación de agua desalada, que es clave para la isla de Formentera", ha destacado el conseller Vicenç Vidal.
Las obras, que han durado algo más de un año, terminaron en junio, pero seguirán tres meses más con los acabados.
La empresa Depuración y Tratamiento (SADYT), que se encarga también de la explotación y el mantenimiento de la planta desde 2013, ha ejecutado los trabajos.
También se han instalado recuperadores de energía isobáricos independientes para cada línea, lo que reduce de forma considerable el consumo de electricidad
