Cada 17 de enero, muchas familias de la isla tienen una cita ineludible: acudir con sus mascotas a la bendición de animales del día grande de Sant Antoni. Todos los años antes de la llegada del covid, cientos de animales de una gran variedad de especies pasaban delante del obispo para recibir su bendición, como un ritual y un pretexto perfecto para salir a disfrutar de una jornada de fiesta.

Los carros volverán a recorrer hoy las calles.

Si en 2020, cuando el covid aún parecía suficientemente lejano, el festejo se celebró con normalidad, en 2021 el calendario festivo de Sant Antoni se tuvo que cancelar y el único acto que se pudo mantener fue la misa. Ni procesión, ni animales, ni nada de nada.

Este año, con la nueva ola de contagios, el Ayuntamiento ha decidido reducir al mínimo el programa en enero. Una vez más, «por responsabilidad», los portmanyins tendrán que esperar para celebrar citas tan emblemáticas como la Flower Power o La Movida, el Campeonato de Arroz de Matanzas o la Marxa del Porquet. Pero, tras un año en blanco, hoy sí que podrán llevar a sus animales a la bendición que comenzará tras la misa.

Será a las doce del mediodía cuando dé inicio el acto religioso en la iglesia del pueblo. Una vez finalizado, habrá procesión, bendición de animales y los carros tradicionales volverán a desfilar por las calles. El Club Columbòfil Portmany procederá después a la suelta de palomas, otro de los actos habituales de las fiestas.

Para finalizar la fiesta, la colla Sa Brisa de Portmany ofrecerá ball pagès frente al ayuntamiento. Y, para poner la guinda al día, qué mejor que sentarse a comer en alguno de los restaurantes del pueblo que permanecen abiertos.