Desde la llegada del covid, el municipio de Sant Joan ha sido uno de los más conservadores en la celebración de las fiestas patronales por precaución y responsabilidad. Pero, por fin, ha vuelto a impulsar algunas actividades a finales de este mes de septiembre para celebrar el día de Sant Miquel. Con un programa «un poco más discreto que otros años», pero «con las mismas ganas de siempre» afrontaba la Comissió de Festes de Sant Miquel esta celebración. «Sant Miquel está aquí otra vez. Estamos listos para volver a bailar. Tendrá que ser desde la silla por ahora», publicaban en sus redes sociales.

Día grande del pueblo

La festividad grande de esta localidad se celebra hoy. El primer aviso llegará con el gran repique de campanas a las nueve de la mañana, que dará paso a un día de actos tradicionales. A las doce del mediodía comenzará la misa solemne que, tras un año de parón, volverá a ser acompañada de la procesión (en 2020 quedó cancelada por la situación sanitaria).En torno a la una de la tarde, sa colla de Balansat será la gran protagonista frente a la iglesia con una exhibición de baile payés que acercará un poquito más a la normalidad a los asistentes.

Hoy volverá a haber exhibición de baile payés tras el oficio religioso. | SERGIO G. CAÑIZARES

Quienes visiten el pueblo pueden también pasar por la exposición de pintura que permanece en el bar de la tercera edad de la plaza de Sant Miquel.

Actividades para todos

Con el fin de los actos de hoy se cierra un programa en el que ha habido un poco de todo. En días previos, concretamente el pasado viernes, se celebró un campeonato de futbolín que reunió a jóvenes y no tan jóvenes que jugaron por parejas en la plaza.

El campeonato de futbolín.

El sábado una gran batucada brasileña llamó la atención de todas las personas que se encontraban en el pueblo. Una actuación animada tras la que estaba previsto el concierto de ‘La 22 Formentera’.

Batucada que animó las calles en la noche del sábado.

La misa comenzará hoy a las doce del mediodía; después habrá procesión y baile payés frente a la iglesia

El domingo por la mañana tocaba hacer ejercicio, con la caminata circular que tuvo lugar desde la iglesia del pueblo hasta el Port de Sant Miquel. Por la tarde llegó la fiesta infantil en la que los pequeños pudieron disfrutar de diferentes talleres, juegos y actividades en un entorno familiar y divertido. En la plaza del pueblo se volvió a sentir ese aire festivo que tanto gusta en Sant Miquel.

Talleres y actividades infantiles en la plaza.

Juegos para los más pequeños.

Además, los aficionados al teatro pudieron también disfrutar el domingo de la obra ‘Sa Vidriola’, que representó el Grup Es Cubells. Las sillas instaladas frente al escenario se llenaron de personas con ganas de disfrutar de la cultura en las recuperadas fiestas del pueblo.

Representación de la obra ‘Sa Vidriola’, del Grup Es Cubells.

Fiestas con seguridad

Todas las actividades han sido organizadas por la Comissió de Festes de Sant Miquel en colaboración con el Ayuntamiento de Sant Joan de Labritja, que han velado por el cumplimiento de los requisitos sanitarios.

«Pedimos la colaboración de todos para poder festejar de la manera más respetuosa posible», manifestaban desde la comisión de fiestas. De hecho, todas las actividades tienen capacidad limitada y el uso de la mascarilla es obligatorio.

Por otro lado, este año se han puesto a la venta camisetas y suéters con el diseño de Freddy Pagès con el eslogan de estas fiestas: ‘Ja podem sortir!.