Treinta fueron los llamados pero sólo cuatro los elegidos. Lo que seguro nadie les puede quitar a todos los participantes en el concurso de vi payés de Sant Josep es el mérito de mantener viva la tradición de elaborar el vino de forma artesanal en casa.

Tres representantes de Enotecum decidieron el pasado lunes que el premio al mejor caldo lo merecía Toni Prats, de sa Plana, que por fin recogía el ansiado galardón después de dos años quedando tercero y segundo. Josep Ferrer y Vicent Sunyer se quedaron con el segundo y el tercer premio, respectivamente. El premio especial, con un rosado, fue para Rolf de Can Tunis.

Cata de nivel

La cultura vinícola tiene una segunda cita en las fiestas de Sant Josep. El pasado viernes 7 de marzo los interesados en este mundo pudieron asistir a la cata de vinos que organizó Enotecum en el restaurante Es Galliner. Por 15 euros pudieron probar cinco pinchos y cinco vinos.