Toni Riera es el propietario y fundador de Harinus. Una cafetería en la que se pueden comprar y degustar numerosas variedades de panes, bollos, tostadas, cocas, incluso ensaladas o bocadillos. En 2012, tras pasar cinco años en Barcelona y uno en Toronto, buscaba la oportunidad de volver a Ibiza. Se unieron así la experiencia que había adquirido en empresas de panadería y pastelería, la tendencia que había visto de este tipo de establecimientos en otros lugares, y las ganas de trabajar.

Desde aquella idea hasta hoy, ¿cuántos establecimientos ha creado?

Contamos con siete Harinus; cinco en Ibiza centro, uno en Sant Antoni y otro en Santa Eulària. Los cuatro primeros locales los abrimos en dos años, cada seis meses más o menos. Luego el ritmo fue más lento. El último se abrió en plena pandemia, hace dos años, al lado del puerto.

¿Todos los establecimientos son de su propiedad?

Todos los Harinus son propios y solo los hay en Ibiza. Es una empresa creada por un ibicenco por y para Ibiza. Nos gusta la cercanía a la gente y ser una marca local de la isla.

Para una pequeña empresa esta velocidad de aperturas no es frecuente.

El éxito nos sorprendió a nosotros mismos. Supimos aprovechar muy bien la tendencia, vimos que el negocio gustaba y por eso abrimos los cuatro primeros tan rápido. La idea había encajado muy bien en la isla y si no lo hacíamos nosotros lo haría otro.

Uno de los establecimientos de Harinus. DI

¿Tiene previsto abrir más establecimientos?

De momento, no. Queremos estabilidad como marca y para los trabajadores. Hace 10 años era más fácil, sobre todo por los precios del alquiler, hoy están desorbitados. También el mercado era más estable, ahora en tres mes se multiplica el precio del aceite, sube un 50% el precio de la harina, con estas fluctuaciones es complicado tener aquel crecimiento.

Seguro que ha tenido propuestas para hacer franquicias.

Sí, pero nunca se ha franquiciado ni se va a franquiciar. Siempre hemos dicho que no. En algunos casos con personas que son conocidas y que sabíamos que iban a tratar bien el negocio, realizamos labores de asesoramiento. Hemos montado una rama de consultoría y asesoría a través de la que ayudamos a emprendedores de fuera de la isla a montar negocios parecidos al nuestro, les damos formación, recetas, asesoramiento con la maquinaria, gestionamos las obras, el resultado es parecido pero bajo una marca distinta. Lo hemos hecho en cinco ocasiones y dos de los empresarios tienen dos locales. Rechazamos el 90% de las solicitudes.

¿Qué tipos de productos se pueden encontrar en Harinus?

Para resumir diríamos que hay tres bloques: Panadería y bollería; cafés y derivados; y zumos naturales, batidos y smoothies.

«No vamos a crecer más, Queremos estabilidad como marca y para los empleados»

¿Cuáles son los productos estrella?

Los productos más vendidos son: ensaimadas, los ‘antoñitos’, las distintas variedades de cruasanes, tostadas, cafés. En general todo funciona muy bien porque hemos conseguido un equilibrio que cumple con las necesidades de nuestros clientes; desde un niño que disfruta con una ensaimada de chocolate, a alguien que le gusta cuidarse más y se toma una tostada con aguacate o una persona mayor que pide un chocolate caliente.

Muchos de los productos de Harinus se elaboran en su obrador. DI

¿Elaboran todos los productos?

Ojalá pudiéramos elaborar todo y ofrecer la variedad que tenemos. Para cumplir con todo tipo de clientes, contar con productos premium, con variedades especiales y con productos agresivos en precios es imposible hacerlos todos. Lo que sí es cierto es que todo lo que compramos tiene que cumplir con el estándar de calidad interno que tenemos.

¿Cómo ha ido la temporada?

Muy bien, excepto en Isidoro Macabich donde las ventas han bajado por las obras, pero espero que la calle quede muy bien y se recupere en invierno. Vamos a aprovechar esta circunstancia y cerrar la cafetería unas semanas para hacer una reforma y darle un toque más ibicenco.

Las ventas bien, y ¿ la facturación?

Calificaría la temporada de irregular y cambiante. Ha sido una locura por las subidas en las materias primas y la energía lo que complicaba hacer previsiones. No se ha podido repercutir el precio al cliente ni podíamos cambiar los precios a diario.

Como la mayoría de los empresarios del sector, me imagino que ha tenido problemas de personal.

Sí claro, en verano tenemos 90 empleados y todo el año 75. La falta de personal es un tema complicado de resolver porque los trabajadores que hay en la isla nos los repartimos entre todas las empresas y no hay suficientes.

«Todos los productos cumplen con el estándar de calidad interno que tenemos»

¿Alguna solución?

Intentamos comprar pisos o estudios para los trabajadores y que los tengan a precio razonable, pero no podemos hacerlo al ritmo que necesitamos.

Cada Harinus tiene su estilo propio de decoración. DI

¿Cuál es el éxito de Harinus?

Todo el equipo: gerente, encargados, panaderos, vendedores, repartidores, administrativos. Un 80 o 90% de la plantilla lleva muchos años en Harinus . Esto nos permite crecer y afrontar situaciones difíciles como esta temporada.

¿Y respecto al modelo de negocio?

Creo que la unión del binomio calidad y precio es excelente. También, la variedad que hay para todos los gustos, edades y momentos y los locales que son bonitos y están cuidados. Cuando se quedan obsoletos los reformamos.