El ‘boom’ de las bodas internacionales en Ibiza
Los organizadores de eventos han cuadrado sus agendas este 2022 para celebrar los enlaces aplazados en los dos últimos años por la pandemia y atender las nuevas peticiones para este año
Han pasado más de dos años desde el inicio de la pandemia, de aquel 2020 en el que las bodas, como tantos otros eventos, se paralizaron en todo el mundo. Agendas repletas de actividad quedaban en blanco durante meses, obligando a aplazar un sinfín de celebraciones, muchas de las cuales a día de hoy todavía no se han celebrado.
Muchos profesionales relacionados con el sector de las bodas coinciden en que, este 2022, se va a producir un boom de bodas internacionales en Ibiza. «La verdad que las previsiones de este año son magníficas, ¡celebraremos el amor por todo lo alto! —expresa Mónica Martell, Sales Manager de Aguas de Ibiza Grand Luxe Hotel—. Es una alegría saber que la gente sigue con ganas después de todo».
En 2021 ya comenzaron a celebrarse algunas bodas pero, especialmente la clientela internacional, decidió esperar un año más por lo general. Las normativas sanitarias eran diferentes en los distintos países, y todavía había muchas restricciones y cambios constantes que podían afectar a la celebración del evento. La mayoría de los novios no quería arriesgarse a organizar su enlace teniendo que desplazar a decenas de personas desde países como Reino Unido, Holanda o Alemania a Ibiza por si, en el último momento, las restricciones cambiaban y no lo podían celebrar.
«El año pasado estuvimos muy pendientes de todas las actualizaciones del BOIB y, a pesar de que nos adaptamos completamente, generaba un poquito de estrés a nuestros pobres novios. Pero, aun así, hemos tenido eventos preciosos el pasado año 2021. Por lo que esperamos que este año tengamos un poco de respiro y podamos seguir organizando y celebrando sin estar tan pendientes, pero lógicamente respetando la normativa vigente», expresa Mónica Martell.
«Las bodas aplazadas son generalmente de extranjeros», afirma Xesca Guasch, del restaurante Es Nàutic y la Oleoteca Ses Escoles. En ambos establecimientos celebran bodas y han notado un incremento en las reservas para celebrar este tipo de eventos este año.
Además de las nuevas reservas, Guasch tiene programadas bodas de parejas de otros países que pospusieron sus enlaces el año pasado a causa del covid. «Este año se casa aquí una pareja de franceses que siempre han veraneado en Ibiza, que tuvieron que aplazar su boda y este año vienen con bebé incluido», comenta.
Las nacionalidades de parejas extranjeras que quieren casarse en Ibiza no sufren grandes cambios: el mercado británico sigue siendo el principal, aunque el abanico de procedencias es extenso y alcanza incluso a novios de Nueva Zelanda.
Respiro en las restricciones
Respecto a los retos que tienen por delante los profesionales en la organización de bodas esta temporada, además de cuadrar unas agendas tan repletas, Mónica Martell afirma: «Ahora mismo solo esperamos que no haya grandes cambios en referencia a las restricciones, para que todo fluya y nuestras parejas puedan planear y organizar su gran día, tal y como siempre han soñado».
Aunque algunos profesionales consideran que hay un overbooking muy marcado que pone el horizonte ya en 2023 y 2024 para la organización de nuevas bodas en Ibiza, otros se muestran más optimistas.
¿Será posible ponerse al día este 2022 respecto a todos los eventos aplazados? «Eso haremos y con muchas ganas, será una temporada muy completa y con mucho trabajo», manifiesta la Sales Manager de Aguas de Ibiza Grand Luxe Hotel.
Tendencias tras la pandemia
Algunos organizadores de bodas de la isla ven una tendencia a celebrar enlaces más íntimos en la actualidad, tanto en parejas residentes en Ibiza como en novios que llegan de otros países. La pandemia ha cambiado el concepto que se tenía de esta celebración en muchos casos, reduciendo el número de invitados, aunque también se aprecia el efecto contrario: parejas que, tras la larga espera, quieren organizar un evento a lo grande.
Otro aspecto cada vez más habitual, según Martell, es que «las parejas se preocupan de que el espacio donde se realice el evento sea amplio y ventilado», y solicitan mucho «un aperitivo largo y amplio», a causa de las ganas de socializar tras tanto tiempo sometidos a restricciones. Por suerte, estas solicitudes son fáciles de solucionar en Ibiza, ya que la mayoría de parejas buscan los espacios exteriores para organizar sus ceremonias y banquetes.
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