Las mesas electorales de Ibiza en las que todo cambió

El análisis de los datos del domingo pasado desgranados por secciones permite configurar un mapa detallado de la evolución de los apoyos electorales en cada barrio y parroquia de la isla. Una marabunta de datos que son fascinantes de desentrañar, y que tras su apariencia apabullante, señalan los cambios de tendencia y realizan una radiografía del comportamiento electoral de los ibicencos. Tras unas cuantas horas estudiándolos, aquí les ofrecemos algunas conclusiones.

Después de Vila, el segundo cambio político que se vivió el pasado domingo en Ibiza fue en Sant Josep, donde el PP lograba convertirse en el partido más votado con una victoria holgada que se basa en una doble tendencia: por un lado, el reagrupamiento de los votos conservadores entorno al PP y, por otro, un trasvase de votos del PSOE hacia la candidatura liderada por Vicent Roig.

No obstante, si echamos un vistazo a los porcentajes, comprobamos que el PSOE tiene unas pérdidas muy limitadas y encaja bien el golpe: pasa del 32,36% de los votos en 2019 al 29,61% en 2023. En paralelo, hay un desplome de Unidas Podemos, que pasa del 11,58% al 6,5% y pierde 508 votos. Por tanto, se produce un drenaje de votos de izquierda a derecha: centenares de votantes pasan de Unidas Podemos al PSOE, y de estos, al PP.

En Sant Josep además, al PP le ha favorecido integrar a Proposta per Ibiza y que Ciudadanos, en esta ocasión, no haya presentado candidatura en el municipio. Ambas formaciones conservadoras sumaron en 2019 un total de 1.166 votos. La mayor parte de ellas han ido a parar a la candidatura de Vicent Roig, ya que Vox solo ha registrado un aumento de 250 votos.

En 2019, el PSOE fue la fuerza más votada en Platja d’en Bossa, Sant Francesc, Sant Jordi, sa Carroca, en el pueblo de Sant Josep, Sant Agustí, Port des Torrent y Cala de Bou. En 2023, únicamente ha logrado liderar los recuentos en Platja d’en Bossa, Port des Torrent y Cala de Bou.

El caso de Cala de Bou

Si ponemos la lupa en cada distrito, observamos que este cambio no se debe a una debacle del PSOE, sino a un crecimiento espectacular del PP. Así, en Platja d’en Bossa, el PSOE aguanta muy bien el tipo, y pasa del 39,9% al 37,4% del votos. En Sant Jordi, incluso aumenta sus apoyos, del 26,1% al 26,2%; y lo mismo sucede en Port des Torrent: 43,7% al 46,9%, y también en los diversos distritos de Cala de Bou, con incrementos de hasta 5 y 7 puntos en algunas mesas.

Sin embargo, estos buenos resultados del PSOE no le permiten sumar mayoría, ya que se acompañan de una debacle total de Unidas Podemos. La formación de izquierdas, que en 2019 llegó a ser la segunda fuerza política en Port des Torrent y en algunas mesas de Cala de Bou, ahora se ha visto relegada a cuarta fuerza en Cala de Bou, donde ha sido superada por Vox. Este barrio, que en 2019 votó inequívocamente a las izquierdas, es donde Unidas Podemos se desangra, pasando en algunos distritos del 17,1% al 7,6% de los votos, o del 18,3% al 8,2%. Pérdidas que en casi todas las mesas alcanzan los diez puntos.

Solo Caló des Moro sigue rojo

En Sant Antoni se repite un patrón parecido: el PP absorbe todo el voto conservador que hay en su órbita gracias a la desaparición de Ciudadanos, la pérdida de la mitad de los votos de El Pi y a una subida muy limitada de Vox, pero suficiente para que los ultraderechistas desbanquen a Podemos como tercera fuerza.

En todos los barrios donde el PSOE fue la fuerza más votada en 2019 se produce un vuelco excepto en Caló des Moro, donde los socialistas superan a los azules por solo nueve votos de diferencia. No obstante, se trata de una victoria pírrica, ya que aquí en el 2019 el PSOE barrió (48% frente a un 24,6%).

En los otros barrios rojos, se produce el sorpasso. El crecimiento socialista en el barrio de es Molí -del 33,9% al 35,4%- no es suficiente para frenar a la marea azul -del 30,2% al 44%-, mientras que en el casco histórico del pueblo, el PSOE retrocede levemente -del 41,9% al 37%- y es superado por el PP, que pasa del 30,7% al 43,4%.

Pero el crecimiento más espectacular se produce en el barrio de ses Païsses, de donde es su cabeza de lista, Marcos Serra. Aquí el PP pasa del 38,5% de los votos en 2019 al 54,6%. Mientras, los socialistas se dejan 7 puntos -se quedan con el 21,5%-. Serra también le pega un buen bocado a El Pi, que tenia en este barrio su principal granero de votos, y se lleva la mitad de sus apoyos.

El norte conservador

En el norte de la isla, la supremacía del voto conservador es apabullante. En Sant Joan, la suma de las tres derechas -PP, Sa Veu des Poble (SVDP), y la lista de Santi Marí- suman más del 80% de los sufragios.

Analizando los resultados por pueblos, comprobamos que SVDP es un fenómeno miqueler, ya que en Sant Miquel obtiene el 30,8% de sus apoyos. Santi Marí, en cambio, se hace fuerte en Sant Llorenç, con un 36,5%. El PP logra vencer en todas las parroquias del municipio, de manera ajustada en Sant Llorenç, de manera más holgada en Sant Miquel (41,4% de los votos) y barre en Sant Joan y sa Cala (63,5%).

El PP también obtiene apoyos abrumadores en las zonas rurales como Sant Carles (76,2%) y Santa Gertrudis (71,2%). Curiosamente, en la zona de es Canar, Unidas Podemos obtiene un sorprendente 15,9% de los votos.

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