En 1970, cuando regresaba de la isla de Aruba de un viaje familiar de vacaciones cargado como una mula con dos enormes maletas de 70 cmts de diámetro atiborradas de ropa y recuerdos, Bernard D. Sadow tuvo una revelación. Al ver cómo en el aeropuerto una máquina manejaba con suma facilidad pesadas cargas mediante un sistema de ruedas, pensó que esa misma tecnología sería muy útil para aplicarla a las pesadas maletas de viaje qué, tanto él, como otros muchos viajeros, arrastraban sudorosos en las colas de pasaporte.

Y dicho y hecho, se puso manos a la obra. Cogió las ruedas de uno de los armarios de su oficina, les puso una correa y los fijó en su maleta. Y !!!EUREKA!!!! Funcionó. Este invento tiene la patente nº 3.653.474 de EEUU calificado como “equipaje rodante”, no despegó inmediatamente. Mejor dicho, le costó comenzar a rodar.

Hay que recordar, que el hombre pisó la luna antes de pensar en incorporar una simples ruedas a una maleta de viaje.

¿Qué lección podemos extraer de esta peculiar anécdota?. Pues varias cosas. En primer lugar y como ya hemos citado en varias ocasiones en esta sección, la enorme resistencia al cambio por parte de los clientes. Este invento, en apariencia tan útil y sencillo, no empezó a funcionar hasta que la cadena de almacenes Macy’s empezó a promocionarla cómo el “equipaje que se desliza”, pero no fue hasta 1987, cuando Robert Plath, un piloto de Northwest Airlines popularizó el Rollaboard, precursor de los actuales Trolleys y la forma de viajar cambió para siempre.

En segundo lugar, debemos comprender que la tecnología es un medio para hacer más eficientes los procesos, no un fin en si misma. El modelo de Amazon es paradigmático en este sentido. La experiencia de compra siempre ha sido un elemento fundamental en la estrategia de Amazon y Jeff Bezos ha estado siempre dispuesto a sacrificar la rentabilidad a corto plazo en aras a una fidelización del cliente a largo plazo. El modelo Amazon pivota en tres ejes fundamentales: el cliente es lo primero (hazle la vida más cómoda, compras en un clic, devoluciones fáciles y gratuitas, lista de los deseos, un catálogo inmenso y en permanente crecimiento…), más cosas y más rápido, desde que en 1995 Bezos vendiera desde el garaje de su casa el primer libro “Fluid Conceps & Creative Analogies”, la oferta de Amazon no ha parado de crecer. La compañía hace tiempo que dejo de ser una enorme tienda para convertirse en una plataforma, pero la filosofía sigue siendo la misma: si quieres algo Amazon lo tiene, lo tiene más barato y te lo entregará muy, muy, muy rápido. Y el último punto y tal vez el más importante es su sistema de logística. Ya lo decía Napoleón, mientras que los aficionados piensan solo en la estrategia, los profesionales nos ocupamos y preocupamos por la logística.

Hoy Amazon cuenta con más de 100 centros logísticos en todo el mundo y constituyen la piedra angular de un proceso armónico en el que la empresa pueda trackear el viaje completo de una compra desde que el cliente hace clic, hasta que la recibe en su domicilio. Amazon utiliza más de 300 métricas diferentes para monitorizar todo el ciclo de compra de un producto y las revisa cada día para tratar de encontrar márgenes de mejora en tiempo y eficiencia. Amazon está obsesionado con los precios, pero sobre todo con la reducción de los tiempos de entrega a la mínima expresión. En grandes urbes cómo Madrid, Londres, Berlín, Filadelfia, etc…. Trabajan con fórmulas de entrega en el mismo día, y en la capital del mundo realizan entregas en menos de una hora mediante drones y bicicletas. 

Todo este enorme potencial ha podido desarrollarse y expandirse comprendiendo la tecnología y utilizándola como medio para mejorar todo lo posible una idea innovadora y rompedora, pero en constante evolución. Un modelo basado en el ensayo, el error, la corrección y el aprendizaje. Pues como dijo Bezos cuando buscaba financiación para su proyecto “el fallo es el hermano gemelo de la innovación”.

Si quieres saber cómo sacar el máximo partido a una idea innovadora, regresa a los básicos y habla con nosotros. Te daremos las claves para que la tecnología se convierta en tu mejor aliado y sobre todo evitaremos que tu empresa acabe siendo esclavizada por una mala elección en la tecnología.

Más info en www.mad-men-agency.