La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y Bolsas y Mercados Españoles (BME) tumban el principal argumento de Ferrovial para justificar su traslado de sede a los Países Bajos. Ambas instituciones han realizado un análisis, que además BME ha realizado sobre el terreno en Estados Unidos, y concluyen que no existe ningún impedimento para que cualquier compañía española o europea pueda cotizar directamente en Estados Unidos.

La CNMV insiste en que “no hay ninguna imposibilidad". "Hemos analizado el aspecto regulatorio y no hemos encontrado nada que lo impida. El asunto es que hasta ahora no lo ha intentado ninguna”, añaden desde el regulador. Por su parte, BME se expresa de similar manera: “No hay obstáculo para cotizar en Nueva York y así se lo hemos trasladado a Ferrovial”. De hecho, en Bolsas y Mercados ponen como ejemplo a la empresa australiana Berkeley, que quería poner en marcha un proyecto de minas de uranio en Salamanca: “Vino aquí y nos dijo que le gustaría cotizar en España y la ayudamos y está cotizando en bolsa”.

Según las instituciones españolas de los mercados, en ningún momento Ferrovial ha trasladado ninguna consulta para saber si era posible o no cotizar directamente en Nueva York; lo que, en opinión de medios cercanos al Gobierno, demuestra que el argumento usado por la empresa para justificar su traslado de sede no era cierto.  

Ferrovial contraataca

Sin embargo, Ferrovial ha esgrimido como la principal razón para pedir a la Junta de Accionistas que apruebe el traslado de sede que, en la práctica, la legislación del mercado español imposibilita cotizar mediante acciones ordinarias en EEUU, con lo que solo es posible hacerlo a través de los ADR lo que, según la empresa, solo permite poner en valor una pequeña parte de la compañía. Para Ferrovial es estratégico cotizar directamente en Estados Unidos, ya que, según insiste, más del 90% del valor del grupo reside en activos ubicados fuera de España y más del 90% de los accionistas institucionales son inversores internacionales. La empresa reitera que tiene “además, una presencia creciente en Norteamérica, donde está previsto que se origine una gran parte de las oportunidades del Grupo Ferrovial, presentes y futuras, y de su crecimiento”.

"Actualmente, no existe una estructura que habilite esa posibilidad. Según la información disponible, para crearla, al margen de eventuales cambios regulatorios, habría que dar solución a cuestiones técnicas y operativas (compatibilidad tecnológica, rebalanceos, reconciliaciones de saldos, protocolos de información…). Ello requiere tiempo y la voluntad de los operadores y reguladores implicados", trasladan fuentes oficiales de Ferrovial a El Periódico de España y Activos, el suplemento económico de Prensa Ibérica.

¿Qué empresas españolas cotizan ya en Estados Unidos?

A través de los antes citados ADR's, muchas compañías están presentes en Estados Unidos, incluida la propia Ferrovial: Banco Santander, BBVA, Grifols, Inditex o Repsol. Fuera de este tipo de instrumentos financieros, Iberdrola, además de cotizar en cuatro bolsas españolas, permite comprar y vender acciones de la compañía en el London Stock Exchange de Reino Unido y mantiene a su filial Avangrid cotizando en la bolsa de Nueva York.

Uno de los últimos argumentos de la empresa presidida por Rafael del Pino es que "ninguna sociedad española cotizada ha negociado nunca sus acciones en los mercados de valores de Estados Unidos de manera directa", algo que se contradice con la filial de Iberdrola.

El mayor problema que tienen estos ADR's es la imposibilidad de cotizar en un gran índice, a excepción del Nasdaq, que engloba a las mayores empresas tecnológicas y no tiene sentido que Ferrovial sea incluida.

¿En peligro la operación?

El traslado de la sede de Ferrovial a Países Bajos, como previo paso antes de cotizar en Estados Unidos, está supeditada a la aprobación por parte de la Junta de Accionistas el próximo 13 de abril. Aquellos que voten en contra tendrán derecho a reclamar que sus participaciones sean recompradas a un precio de 26 euros cada una. Para este fin, Ferrovial ha presupuestado un máximo de 500 millones de euros, equivalente al 2,57% del capital social de la empresa. Esto quiere decir que, si más de este porcentaje exige el reembolso, se pondría en peligro el traslado.

El que podría votar en contra es Leopoldo del Pino, hermano del presidente, que cuenta con el 4,15% del capital social, tal y como adelantó El Confidencial. Según ha podido contrastar este periódico, Leopoldo no se plantearía exigir el reembolso de sus acciones que, en su caso, sí serviría para frenar el cambio de sede social a Países Bajos.