La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha señalado este viernes que la medida planteada por Bruselas de establecer objetivos de reducción del consumo de electricidad debe incluir un "margen de flexibilidad" para cada país.

"La Comisión debe introducir un margen de flexibilidad a nivel nacional", ha señalado la vicepresidenta en rueda de prensa después del encuentro con los ministros de Energía de la UE, tras manifestar su conformidad con la implementación de tal medida de ahorro de consumo.

En este sentido, Ribera ha argumentado que el "impacto global" de la medida puede variar de un país a otro en función de la demanda o de si se han puesto en marcha medidas que permitan cumplir con ese objetivo y "puedan llegar a ser distorsionadoras".

En un paso más, la vicepresidenta ha añadido que es "interesante" contar con un objetivo de reducción del consumo en horas punta aunque ha matizado que es importante que haya una "visión de conjunto" sobre "el margen real" de cada país "sin generar distorsiones que dificulten la consecución de este objetivo o pongan el peligro la viabilidad del tejido productivo.

"Es vital incluir medidas encaminadas al ahorro de energía a nivel nacional", ha detallado la ministra para la Transición Ecológica en relación a la medida planteada por el Ejecutivo comunitario.

La situación de los mercados energéticos, según ha apuntado al vicepresidenta tercera, "nos hace reflexionar sobre la necesidad de acelerar cambios estructurales en política energética guiados por los principios del Pacto Verde" así como "cambios estructurales en nuestra regulación".

Ribera ha abogado por "combinar distintas herramientas" para "ser eficaces" en la resolución de la situación en los mercados energéticos y ha instado a incentivar la reducción de los precios de la energía con medidas voluntarias, obligatorias, comunes y decididas a nivel nacional.

Además, la ministra para la Transición Ecológica ha detallado que algunos Estados miembro han puesto de manifiesto su voluntad de aplicar la llamada "excepción ibérica", y que consiste en poner un límite al precio del gas en el mercado mayorista de electricidad para la producción en las centrales de ciclo combinado.

Sobre la introducción de un límite al precio de gas natural en el mercado comunitario, la ministra ha explicado que ha habido una respuesta amplia entre sus colegas europeos para establecer un limite al precio del gas importado desde Moscú.