La crisis energética sigue pasando factura a la economía española. En los seis primeros meses del año, la compra de productos energéticos al exterior se ha multiplicado por 2,4 veces respecto al mismo periodo del año anterior, hasta rozar los 43.384,6 millones de euros, el 140,6% más que los 17.949,7 millones que sumaba la factura energética española en el primer semestre de 2021.

Según los datos de comercio exterior publicados este jueves por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el aumento de la factura energética, se debe tanto a la compra de un mayor volumen de petróleo y gas a países como EEUU, Nigeria, Rusia o Argelia (un 73% más) como al aumento en un 38,8% de sus precios.

Las exportaciones energéticas de España a otros países también han crecido con fuerza, aunque algo menos. En los seis primeros meses del año las ventas energéticas al exterior se han multiplicado por 2,2 veces, hasta rozar los 18.000 millones (17.949 millones de euros). En particular, aumentaron la ventas de petróleo y derivados a países como Francia, EEUU, Países Bajos y Portugal y las de carbón y electricidad, a Francia y Portugal, sobre todo.

Como balance de las exportaciones y de las importaciones, el déficit de la balanza comercial energética se la elevado hasta los 25.894 millones de euros, más del doble que el desfase de 10.097 millones del mismo perido del año anterior.

Balanza comercial

Los datos de la balanza energética condicionan de forma radical los resultados del comercio exterior del primer semestre publicados por el Ministerio de Industria este jueves. La energía es la principal responsable de que el déficit comercial se haya elevado en el primer semestre hasta los 31.963 millones de euros, frente a los 5.397,3 que se anotaron en el primer semestre del 2021.

El déficit comercial es resultado de unas exportaciones que crecieron el 24,8% entre enero y junio, hasta marcar un récord histórico de 190.919 millones de euros, frente a unas importaciones que aumentaron el 40,7%, hasta marcar también un récord de 222.882,2 millones de euros. La tasa de cobertura de las exportaciones respecto de las importaciones se situó en el 85,7%, es decir, 10,9 puntos porcentuales menos que la de enero-junio de 2021 (96,6%).

En particular, el saldo no energético arrojó un déficit de 6.069,4 millones de euros (frente a un superávit de 4.700,2 millones de euros en enero-junio de 2021), mientras que el déficit energético aumentó hasta 25.893,9 millones de euros.

Los resultados acumulados para España muestran un mayor crecimiento de las exportaciones que el registrado en la UE (21,8% interanual) y en la zona euro (22,3%). Entre las principales economías de la Unión Europea, las exportaciones de Alemania crecieron un 13,3% interanual, Francia un 20,1% e Italia un 22,4%. Fuera de la Unión Europea, también crecieron las exportaciones de Estados Unidos (20,3% interanual), China (13,2%), Japón (15,2%) y Reino Unido (16,1%).

Motor de la recuperación

Desde el Club de Exportadores e Inversores se destacó este jueves "el dinamismo de la exportación española como motor de la recuperación económica". Muestra de ello -añaden- es que las exportaciones experimentaron un crecimiento en volumen del 6,6% durante el primer semestre (el incremento se eleva al 24,8% si se tiene en cuenta la subida de los precios).

A pesar de ello, el Club recalca la necesidad de seguir adaptándose a un entorno cambiante, marcado por un contexto internacional de especial incertidumbre, donde ha entrado en recesión Estados Unidos, el mayor mercado del mundo, y reclama políticas económicas que impulsen la competitividad internacional. Antonio Bonet, presidente del Club de Exportadores e Inversores, subrayó “la necesidad de acometer reformas estructurales que faciliten el aumento del número de exportadores regulares”. En España solo hay 59.000 empresas que exportan regularmente y de éstas únicamente 25.000 venden al exterior más de 50.000 euros al año.