Diario de Ibiza

Diario de Ibiza

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Mercado laboral

Las mujeres hacen un 52% más de horas extra 'gratis' que antes del covid

La economía española todavía no ha recuperado sus niveles de actividad previos al virus, pero algunos oficios más feminizados vuelven a estar sobrecargados

Fin de las restricciones en las residencias de mayores en Asturias: los geriátricos recuperan la "total normalidad" en las visitas.

El mercado laboral español se ha instalado en una triple aparente paradoja: hay más trabajadores que antes del covid, pero en conjunto trabajan menos horas y estas están mal repartidas. Y es que pese a que la economía todavía no ha recuperado los niveles previos al virus, hay sectores donde los ritmos vuelven o incluso superan el frenesí característico de la 'vieja normalidad'. Y sus empresas desarrollan de nuevo uno de los vicios característicos del mercado laboral español y que normativas como el registro horario no han conseguido extinguir: las horas extra no pagadas. Un foco de precariedad que en la 'nueva normalidad' se está cebando en las mujeres, entre las que han aumentado el 52% las horas regaladas forzosamente a la empresa.

La economía española ya ha recuperado los niveles de ocupación que tenía antes de la irrupción de la pandemia, si bien la demanda todavía no está recuperada del todo en algunos sectores. Y ello se nota en las horas que semanalmente trabajan los asalariados españoles, que todavía son el 3,8% inferiores a las que se trabajaban en el 2019. Ello se explica, en gran parte, por los mecanismos de protección del empleo habilitados por el Gobierno, como los ertes, que mantienen el puesto de trabajo, pero suspenden la actividad del trabajador. O las bajas laborales ante los contagios, especialmente utilizadas ante la actual ola de ómicron y que en el último mes han dado cobertura a casi dos millones de trabajadores.

No obstante, los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados esta semana constatan el mal reparto del trabajo en la economía española. La EPA permite una fotografía mucho más detallada de cómo evoluciona el mercado laboral que la que mes tras mes ofrecen las cifras de afiliación a la Seguridad Social y paro registrado. Y uno de los indicadores que actualiza trimestre a trimestre es el de las horas extraordinarias realizadas. En España semanalmente durante el último trimestre del año se realizaron, de media, unas 6,3 millones de horas extra. Es decir, asalariados que echaban alguna hora más de las que contempla inicialmente su contrato. Son una minoría, concretamente el 5% de los asalariados, pero esa minoría ya echa el 4,5% más de horas de las que echaba en el 2019.

Siguiendo la tendencia de anteriores crisis, las primeras horas extra que se recuperan no son las que van a complementar el salario y que el trabajador acepta voluntariamente para redondear a final de mes la nómina. Sino que las primeras en volver son las que los empresarios exigen a sus empleados, pero no se las pagan. Pues las horas extras no remuneradas, que representan el 45% del total de horas extra, ha crecido con mayor intensidad. Concretamente ahora se echan el 13,2% más de horas 'gratis' a beneficio de las empresas y a costa de sus trabajadores que antes de la pandemia. En contraposición de las horas extras pagadas, que todavía son el 1,7% inferiores a la etapa precovid.

Brecha de género en horas extra

Las horas de trabajo están mal repartidas tanto por sectores, como entre hombres y mujeres. Pues si bien las horas extras gratis entre los hombres están el 9,1% por debajo de los niveles precovid, las horas extra gratis entre las mujeres se han disparado el 52,4% respecto al mismo periodo. Para explicarlo, desde el gabinete de estudios de CCOO de Catalunya señalan dos motivos. Por un lado, el 'efecto percepción', es decir, que las personas que realizan horas extra son más conscientes de ello y así lo manifiestan. Pues no hay que olvidar que la EPA no deja de ser una encuesta y tiene un elemento subjetivo. En este sentido, el teletrabajo y el alargamiento de jornadas desde el mismo domicilio han provocado que muchas mujeres declaren horas extra que antes podían desempeñar desde su centro de trabajo, pero que no percibían como un 'extra'. Dicha percepción coincide con múltiples encuestas publicadas estos últimos meses con la misma tesis. La última la de la consultora Hays, según la cual el 61% de los empleados que teletrabajan hacen horas extra de manera recurrente y ni las cobran, ni las compensan con festivos.

Y, por el otro, hay un factor de composición. Pues los sectores que más actividad han recuperado están ocupados por un alto número de mujeres. El caso más claro es el de las actividades sanitarias, donde las horas extras han aumentado el 32,1% y hay un alto porcentaje de mujeres que lo componen. O el de actividades del hogar, donde las horas extras han subido el 24% respecto al periodo precovid. No en vano la Inspección de Trabajo ha iniciado una nueva campaña específica para perseguir las falsas jornadas a tiempo parcial entre el colectivo. O las actividades científicas, también feminizadas y con el 30,7% más de horas extras.

Compartir el artículo

stats