Noviembre fue un mes de doble récord para el mercado laboral español, que está aguantando, de momento, las turbulencias de una inflación disparada. El paro bajó en 74.381 personas, situando el número total de desempleados en los 3,18 millones de personas; por debajo de los niveles precovid y en su menor nivel desde 2008. Ello es fruto del empuje del empleo, que volvió a crecer este noviembre por tercer mes consecutivo y sumó 61.768 nuevos ocupados, su mejor registro desde el 2000. España lleva unos meses en lo laboral en los que encadena cifras récord, con un mercado de trabajo que durante este 2021 ha reducido los trabajadores afectados por erte a mínimos, con un total de 116.584 empleados en suspensión a último día de mes.  

Ni la escalada de la inflación, ni la escasez de suministros, ni la nueva variable covid está frenando, por el momento, el auge generalizado del mercado laboral. Noviembre ha roto este año estadísticas. Suele ser un mes habitualmente malo para el empleo, con la campaña de navidad todavía a un mes de distancia, las contrataciones de arranque de curso ya realizadas y el influjo del verano agotado. Solo en tres de 10 noviembres se ha registrado un incremento de ocupados respecto al mes anterior. Este año la cifra total de ocupados sí ha subido y alcanza las 19,75 millones de personas. Si a estos se le restaran los afectados por erte, la cifra de trabajadores en activo seguiría siendo más alta que antes del covid y que antes de que estallara la crisis inmobiliaria y financiera del 2008.

Los sectores que más están tirando del empleo este año son la construcción -con amplias perspectivas de crecimiento debido al empuje de los fondos europeos- y aquellos que el año anterior peor lo pasaron por las restricciones. Las obras, rehabilitaciones y demás actividades de la construcción han crecido en ocupación durante el último año el 4,7%, con unos 15.000 empleados más en este sector que antes del covid. Y gremios como el de la hostelería o las actividades artísticas o recreativas, que vivieron un funesto 2020, acumulan incrementos interanuales del 16,7% y 14,5%, respectivamente; sumando entre los dos más de 200.000 nuevos ocupados. El único sector que ha perdido ocupación en el último año es el financiero, inmerso en un proceso transversal de reestructuraciones y con eres multitudinarios en prácticamente todas las entidades bancarias de referencia.

Ese tirón del empleo se está traduciendo -no siempre tiene esa relación directa- en una caída vertiginosa del paro. El desempleo acumula nueve meses consecutivos de descensos, una racha inauditamente larga y que ha conseguido restar desde enero a 781.666 personas de las colas del SEPE. Este noviembre, el intenso descenso del desempleo, en un mes que suele haber más incrementos que descensos, ha permitido romper una doble barrera. La más inmediata es que por primera vez en España hay menos parados que antes de declararse la pandemia, concretamente 15.497 menos que antes de noviembre del 2019. Y la consecuencia de ello es que el desempleo ha caído a su nivel más bajo desde la Gran Recesión.