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NBA

LeBron James, entre la leyenda y la frustración

El alero de los Lakers tiene al alcance esta temporada el histórico récord de anotación de la Liga de Kareem Abdul-Jabbar

LeBron James conduce el balón en el partido frente a Portland. Reuters

La cuenta atrás del gran día ya ha empezado y hasta se prevé una posible fecha para la celebración: el 25 de enero del 2023. Ese día, LeBron James debería superar la cifra de 38.387 puntos que estableció Kareem Abdul-Jabbar y que le mantiene aún como el líder de anotación en la historia de la liga estadounidense. Entre la marca actual de ‘King’ James y la de la leyenda de la NBA ya solo quedan 1.244 puntos de diferencia. Con la media de 27,1 puntos por partido que mantiene en su carrera, LeBron necesitaría 46 partidos para conseguirlo y eso sucedería el 25 de enero del 2023. Esos son los cálculos que maneja la Liga estadounidense. En un partido contra los Spurs.

Pero ese sentimiento de satisfacción por tener a tiro el histórico récord de Jabbar y agrandar aún más su leyenda en su 20ª temporada, las mismas que el pívot, no evita la creciente frustración que vive LeBron con los Lakers, que han iniciado la nueva temporada con un alarmante 0-3 (derrotas contra Warriors, Clippers y Portland) y con un calendario que invita a pensar que el temporal está lejos de amainar (jugarán con Denver este miércoles y con Minnesota el viernes).

La derrota en el Staples frente a Portland (106-104) este domingo refrescó la sensación de que los problemas de química y falta de tiro exterior que ya apartaron al equipo de los últimos ‘playoffs’ se mantienen. El entorno también aprieta. Las críticas por la continuidad de Russell Westbrook van a ser una tónica durante todo el curso, a no ser que desde las oficinas cierren alguna operación de traspaso que por ahora no se vislumbra.

 “No me gusta perder, odio perder a lo que sea. No me importa lo que pase a lo largo de mi temporada o lo largo de mi carrera. Odio perder especialmente de lo forma en que lo hicimos”, admitió LeBron James, que lideró con 31 puntos a su equipo ante Portland pero falló un potencial tiro para empatar.

Los últimos minutos de los Lakers fueron un compendio de despropósitos sobre cómo tirar un partido que dominaban por 8 puntos a falta de cuatro minutos. En ese margen, el equipo que entrena el novato Darvin Ham se empeñó en lanzar triples (0 de 4) para completar un ridículo 6 de 33 en ese apartado en todo el partido. Westbrook fue uno de los señalados.

Refuerzos insuficientes

Según recoge la ESPN, su carta de tiro en triples (25 de 118, un 21,2%) es la segunda peor de la historia, solo superada por los Atlanta Hawks, en 2018, con un 21%. Así que a Lebron, cuando le preguntaron por el tema, no pudo por menos que decir sarcásticamente: “No meteríamos ni un 'penny' en el océano”.

A pesar de sus 37 años, James sigue siendo el mejor de los Lakers. Promedia 27,3 puntos, 11 rebotes y 7,3 asistencias y lidera los tres apartados estadísticos en el equipo. Lo que hubiera tenido sentido es que los Lakers lo hubieran rodeado de jugadores que lo complementaran. El tiempo ha demostrado que funciona. Le sucedió en Miami (con Dwyane Wade y Chris Bosh) y también en Cleveland (con Kyrie Irving y Kevin Love). Pero los responsables de la franquicia han fallado claramente en su objetivo.

Quedar fuera de los ‘playoffs’ la pasada temporada, tan solo un año después de proclamarse campeones, es una fracaso con mayúsculas, aunque la reacción de los Lakers, muy criticada en las redes, ha sido la de renovar a Rob Pelinka, general manager y vicepresidente de operaciones hasta 2026. Su mejor jugada este verano ha sido la de incorporar a Patrick Beverley, un movimiento insuficiente para sacar al cuadro angelino de los candidatos a quedar fuera de los ‘playoffs’ por segundo año seguido.

Cuando Lebron aceptó este verano ampliar su contrato por dos temporadas más, la búsqueda del anillo estaba en el centro sus obsesiones, aunque no parece estar en el camino correcto por la forma en la que se ha reconstruido la plantilla. Así que el objetivo más plausible para seguir alimentando su palmarés (ya deslumbrante con cuatro anillos de campeón) es entrar cuanto antes en los libros de historia como sucesor de Jabbar. “Estar en condiciones de lograr el récord más buscado de la NBA, algo que la gente decía que no se conseguiría, es abrumador”, sentencia ‘King’ James, ya con la fecha del 25 de enero marcada en rojo en su calendario. 

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